La enfermera personal del fallecido presidente Hugo Chávez, Claudia Patricia Díaz Guillén, aseguró que si las autoridades de España la extraditan a Venezuela, su vida podría correr peligro.
“A más de 6.000 personas se las ha encarcelado en Venezuela sin garantías jurídicas y a algunas las matan. Quieren torturarnos para que confesemos unos delitos que no hemos cometido”, aseguró durante una entrevista para El Confidencial.
Señaló que tanto su gestión como la de Jorge Giordani, ex ministro de Planificación, fueron ejemplares con relación a la supervisión de las arcas públicas del país; sin embargo, durante los últimos días de vida de Chávez, grupos de presión comenzaron a tomar posición en función del vacío de poder que quedaría por la muerte del entonces presidente.
Poco después, Díaz Guillén y Giordani comenzaron a recibir mensajes para cometer actos de corrupción, solicitudes a las que presuntamente se negaron en repetidas oportunidades.
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