Orlando Abreu Vicentelli, más conocido como el Búho en las redes sociales, es un periodista con una historia digna de contar. Este caraqueño nació un 14 de enero de 1994 con una rara condición llamada Amaurosis Congénita de Leber, que reduce su remanente visual hasta un 5%. A pesar del miedo de sus padres sobre su futuro y de las barreras que le podría imponer la sociedad, logró alcanzar metas que hoy lo llenan de orgullo.
«Creo que mientras yo jugaba y era feliz, mis padres sufrían por un supuesto dolor que yo nunca sentí. Para mí es normal ver de esta forma, y ese sufrimiento jamás lo viví, mis padres se torturaban por algo inexistente. Sí, las cosas no han estado fáciles, ¿pero qué es la vida sin algo de dificultad?», afirmó el Búho.
Con estas dificultades, Orlando pudo estudiar en una escuela regular de la parroquia La Pastora, y graduarse posteriormente como licenciado en Comunicación Social de la Universidad Monteávila. Estudió francés en la Alianza Francesa de Caracas, inglés en Nova Community College y actualmente está culminando la Maestría en Estudios Políticos y de Gobierno en la Universidad Metropolitana. «En ocasiones los libros son un problema, porque no se consiguen en un formato que sea accesible para los lectores de pantalla de mis dispositivos electrónicos. Sin embargo, siempre hay formas de darle la vuelta a los problemas. Yo no sería nada en estos momentos si la vida no me hubiese enfrentado a ellos, sobre todo en mi vida académica y laboral», dice de manera risueña.
Su experiencia laboral según comentó ha estado llena de aprendizajes valiosos. «Tanto en el Diario El Nacional, como en Radio Caracas Radio 750 y en agencias de publicidad como Grupo Koncept, me ha tocado enfrentarme a diferentes escenarios en los cuales no solamente he logrado ganar grandes amigos y colegas, sino también fortalezas profesionales. Algo de ello también le debo a la preparación ofrecida por el periódico, la radio y la televisora de mi universidad, que me dio la oportunidad de hacer mis primeras piezas periodísticas», recordó.
Orlando relató que dado a la grave crisis por la que atraviesa el país, añadido a la pandemia del covid-19, se quedó sin empleo. Razón por la cual decidió conformar su propio emprendimiento llamado Aventuras del Búho, que busca ofrecer contenido sobre discapacidad, motivar a los familiares a no tener lástima de algún miembro con una condición limitante y dar a conocer a los gobiernos y organismos internacionales la necesidad de abordar estos tópicos, ya que según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), desde año 2011 la población con discapacidad está en crecimiento. «Este es un grupo social que desgraciadamente en muchos países de Latinoamérica y el Caribe quedan en un nivel de pobreza por la poca voluntad de los estados y de los entes privados a integrarlos a todas las dimensiones de la vida social. Si seguimos con esta actitud, es posible que dentro de unos pocos años el cuarto se nos termine de llenar de agua», reflexionó.
En sus cuentas de Instagram, Facebook y Twitter se puede observar contenido bastante variado. Actualmente tiene un espacio llamado Noche de Búhos, el cual se transmite por Instagram Live todos los viernes, donde entrevista a diferentes especialistas y le da voz a aquellos testimonios de personas con discapacidad, que motivan a seguir construyendo metas, indiferentemente si se tiene o no una discapacidad.
El licenciado también mencionó que a pesar de la receptividad de las personas en redes sociales, existen múltiples limitaciones en un proyecto de esta magnitud. «Es necesario comprar algunos equipos electrónicos, pagar al editor de las imágenes y de los videos, así como también llevar algo a la mesa todos los días. Algo que he logrado percibir es que pocas empresas están dispuestas a patrocinar este tipo de contenido. Por lo que mi novia y yo nos hemos visto en la tarea de trabajar con lo que tenemos. No nos quejamos, siempre es bueno pensar que el día de mañana saldrá Aventuras del Búho a flote. Por los momentos vamos bien», afirmó.
Las metas para el Búho no se terminan: tiene planes de seguir con su vida académica, tal vez culminando en un doctorado. «Nunca hay que detenerse, cuando una meta se alcanza, siempre salen muchas más por alcanzar. Seguiré con mi vida como lo he hecho hasta ahora, pues mi discapacidad nunca la ha detenido. Para mí es una bendición haber nacido con Amaurosis Congénita de Leber, porque me ha dado tantas que no cambiaría por simplemente ver mejor», sentenció.
Instagram: @elbuho_info
Facebook: Aventuras del Búho
Mail: [email protected]
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