Diputada Mariela Magallanes. Foto Archivo
En mi andadura por Italia… me ha sido difícil traducir literalmente «Botaste la bola». Y así su definición: «botar la bola» en Venezuela es «el colmo de lo vergonzoso». ¡Di Martino…botaste la bola!
Resulta que quien funge de cónsul de Venezuela en Milán, Gian Carlo Di Martino, según una publicación de la agencia ANSA del 26 de agosto del 2020, tomada de un artículo larguísimo y fastidioso escrito para aporrea.org por el “bola mala”, en fecha 11 de mayo, desde su cómoda oficina, que pagamos los venezolanos, hace una lista (no tiene otra cosa que hacer) de los que, según él, son “diputados pura pérdida”. No los voy a nombrar a todos porque, como toda lista inútil, es larga: Julio Borges (PJ), Tomás Guanipa (PJ), José Manuel Olivares (PJ), Julio Montoya (PJ), Carlos Paparoni (PJ), Ismael García (VP), José Guerra (Independiente) y, en lo que concierne a Italia, Américo De Grazia (La Causa R) y Mariela Magallanes (La Causa R), quienes según las propias palabras de Di Martino “están en su demente obsesión de derrocar a Nicolás Maduro”. Y resulta que no es obsesión sino deber constitucional, señor supuesto Cónsul “ponchado” (y discúlpeme el lector por lo de “señor”). Y para que quede como un bobo, más de lo que usted es, su propio jefe Maduro decretó indulto hace dos días a varios de los que están en su lista inútil, entre ellos: los diputados Américo De Grazia y Mariela Magallanes.
La diputada Magallanes, por cierto, ya ha invocado oficialmente la intervención del ministro de Asuntos Exteriores de Italia, Luigi Di Maio, denunciando con una comunicación oficial “estar en la mira del cónsul de Caracas en Milán”, a la vez le ha pedido que fije posición.
Escribió Magallanes a Di Maio: “El cónsul general de la República Bolivariana de Venezuela en Milán, Gian Carlo Di Martino, publicó un artículo para un diario venezolano en el que, literalmente, pide ‘poner una recompensa’ por la cabeza de Julio Borges , expresidente de la Asamblea Nacional de Venezuela; de Tomás Guanipa, secretario de Primero Justicia; uno de los principales partidos de oposición, y embajador del gobierno interino de Venezuela en Colombia y de todos los demás exponentes políticos que define el cónsul ‘terroristas, prófugos en Colombia’.
“Nos dirigimos a usted para preguntarle si es lícito que un diplomático acreditado ante la República italiana pueda, en la prensa (online), hacer amenazas y fuertes intimidaciones contra exponentes de la Asamblea Nacional, el único organismo reconocido como legítimo por la República italiana, y qué medidas piensa tomar contra el cónsul único general de la República Bolivariana de Venezuela en Milán, Gian Carlo Di Martino».
En la misiva, Magallanes recuerda que el cónsul Di Martino “ya se había convertido en protagonista de otro episodio de gravedad sin precedentes: en una intervención publicada en el mismo diario (online), cuando había elaborado una lista de parlamentarios que tenían la supuesta intención de ‘fomentar violencia y terrorismo’, en la que incluía a todos los parlamentarios en el exilio, entre ellos, Américo De Grazia y quien suscribe, que llegamos a Italia en diciembre de 2019 después de haber encontrado refugio durante casi un año en la Embajada de Italia en Caracas. Una especie de lista de proscripción que en su momento había despertado mucha preocupación en todos nosotros y cuyo carácter intimidante encuentra, a mayor razón hoy, plena e inquietante aquiescencia en este último pedido de poner recompensa sobre la vida de Julio Borges, Tomás Guanipa y otros parlamentarios venezolanos que emigraron forzosamente a Colombia”.
Mientras los venezolanos exilados en Italia esperamos la respuesta del ministro Di Maio, ante la gravedad del asunto, yo le sugeriría “desapasionadamente” a quien funge de cónsul venezolano en Milán -y al que yo vi en un video de manera histérica quemar una foto de Guaidò en los pasillos donde tiene sede nuestro Consulado- que se dedique más bien a los retrasos que, cada vez más, se suceden en la entrega de los pasaportes, documento vital para el venezolano en el exterior.
Además del hecho que el pasaporte venezolano es el tercero más caro del mundo, según la lista de Passsport-collector.com del 15 de julio de 2020 https://www.passport-collector.com/, la corrupción asociada a la emisión del pasaporte se convierte para el régimen, abiertamente, en un mecanismo de control político de los ciudadanos. Si a ello se suma el hecho que el imperio castrista-cubano que nos ha colonizado controla el software y dirige las normas de seguridad del registro de identificación y migratorio del Estado venezolano, obtener el pasaporte o renovarlo es una verdadera «odisea».
Renovar o solicitar un nuevo pasaporte en Italia, en cualesquiera de sus tres consulados, significa, en teoría, esperar un período que va entre los 3 y 7 meses, pero el retraso proverbial del proceso del Saime se ha prolongado indefinidamente en el tiempo, hasta crear una crisis de identificación del venezolano en el extranjero, en cualquier parte del mundo esté.
En vista de la irresponsabilidad de los consulados venezolanos, los compatriotas que se ven gravemente afectados han tenido que organizarse para enfrentar esta situación. Por ejemplo, en Italia, un movimiento de ciudadanos venezolanos migrantes, localizados en la península y en las islas de Sicilia y Cerdeña, han instituido el #Savemyidentity (unidos a los existentes de Alemania, Bélgica, España, Finlandia, Reino Unido, Suiza, Argentina, México, Perú y otros países de Centroamérica y Suramérica) llevando adelante una campaña en Change.org lanzando un SOS como manifestación de aquellos venezolanos en el mundo que piden soluciones y pasaportes ¡ya!
En las islas de Sicilia y Cerdeña, Robert Drmbic y su esposa Liana Suárez, con su red informativa El Rincón Venezolano News motivan y a su vez reciben denuncias sobre la crisis de documentos. Y en tierra firme, Odilia Sofía Quattrini, afirma: “Hay que moverse para difundir el grave problema que tienen los venezolanos en Italia respecto a sus pasaportes. Sensibilizar a las autoridades italianas y a la clase política respecto a este problema de identidad de nuestros compatriotas”.
Son mucho más de 5.000.000 de venezolanos en el exterior, ¿cuántos estamos afectados por trámites del Saime? Colocándonos en situación vulnerable al ser expuestos a las consecuencias de no tener derecho a la identidad y al libre tránsito, consagrado en el artículo 13 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos y garantizado por el artículo 50 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, que debe leerse en concordancia con las disposiciones de la “Letter of Intent” (LOI) o, en español, “Carta de Intención” que estipula el derecho de todos los venezolanos a poseer un medio de identificación otorgado por un órgano competente del Estado (Art. 5 LOI).
Di Martino, dedíquese a lo que le corresponde y siéntase bienaventurado que de director de la Cárcel Nacional de Maracaibo pasó usted, sin formación ni mérito alguno, a ser un diplomático bastante aproximado que nos avergüenza… ¡BOTASTE LA BOLA!
@CarlosOmobono
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