Por ALEJO URDANETA
La poesía está fundada en un acto libre para compartir emociones y sentimientos que estimulan la sensibilidad y que forma al ser humano en cuerpo y alma. Al emprender el motivo de la emoción, vista en términos generales, y de la sensibilidad y la imaginación, la poesía transmite conocimientos y valores humanos, contenidos en el sentido del bien y del mal, la historia, las proezas del ser humano, las tradiciones antiguas y el vínculo con la naturaleza. Todo lo que concierne a la existencia surge como instinto en los primeros años de vida del ser humano.
Despierta los sentidos el poeta mediante las palabras y la creación de belleza en el lenguaje, y también cultiva la imaginación y la memoria. Es toda una realización de las facultades corporales y anímicas del hombre. La forma de cuanto se dice o escribe es tan importante como el sentido que el creador poeta comunica: mediante la palabra. También en la música hay poesía aunque no contenga palabras, salvo excepciones.
El poeta no tiene por finalidad comunicar un pensamiento, sino despertar en los demás un estado emocional en el que nazca un efecto análogo al presentado, pero no idéntico al suyo.
Dijo Albert Camus en su ensayo El artista y su tiempo que el poeta reconquista el lugar que le corresponde en el corazón de la sociedad cuando crea para expresar la alegría de estar presente en el mundo o, por el contrario, para cantar el dolor.
Es frecuente identificar como objetivo del poema el amor y la pasión del ser humano. En estos casos el poema expresa sentimientos individuales, de felicidad o tristeza. La literatura, desde sus orígenes, recoge las emociones y experiencias en torno al nacimiento del amor y la pasión, a su consolidación y a todo el entramado de emociones y sensaciones que las envuelve.
El poema, al ser expresión de los sentimientos, a lo largo de la historia se ha relacionado en alto grado con el amor; pero hay que relacionarlo con otros temas diversos que reflejen también las emociones del autor ante la contemplación del mundo o de la realidad: pena, soledad, miedo, fracaso, alegría, desamparo, nostalgia. Y pudiéramos añadir temas políticos y sociales. Y todo sería <Poesía>.
He expuesto en estas breves reflexiones las causas que conmueven al poeta, fundamento de la poesía como contenido creativo del poema, que es la forma. Un poema, por otro lado, es la poesía que resulta del acto creador: una composición poética. Existe, además, una serie de recursos poéticos que ayudan en la composición del poema. Estos son la métrica, el ritmo y la rima. El verso de forma métrica, desde la antigüedad, es usual pero no necesario en nuestro tiempo. La poesía debe ser libre y abarcar la experiencia humana en todos sus matices.
Como colofón de esta tesis debo decir que la poesía debe comprender todos los avatares de la existencia. Nos lo dice el poema del venezolano Eugenio Montejo (+) en las estrofas siguientes:
La tierra giró para acercarnos,
giró sobre sí misma y en nosotros,
hasta juntarnos por fin en este sueño,
como fue escrito en el Simposio.
Pasaron noches, nieves y solsticios;
pasó el tiempo en minutos y milenios.
Una carreta que iba para Nínive
llegó a Nebraska.
Un gallo cantó lejos del mundo,
en la previda a menos mil de nuestros padres.
La tierra giró musicalmente
llevándonos a bordo;
no cesó de girar un solo instante,
como si tanto amor, tanto milagro
sólo fuera un adagio hace mucho ya escrito
en las partituras del Simposio
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