La escasez de alimentos y medicamentos son una mezcla explosiva que ha impulsado la migración forzosa de venezolanos hacia el exterior en un intento de superar la crisis que azota los hogares. La hiperinflación desmesurada y un sistema cambiario que cada día se altera más es otro de los motivos de cientos de ciudadanos para salir del país, reseñó ABC.
De acuerdo con cifras del último informe presentado por la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), se contabilizan hasta 3.300.000 venezolanos que han buscado refugio en 16 países de Sudamérica y el Caribe, de los cuales 460.000 niños y adolescentes. Además, dicha investigación vaticina para el año 2019 que el total de venezolanos exiliados puede llegar a 5.3 millones, un exilio que superaría la crisis de los refugiados sirios en un total de seis años con 6.3 millones de desplazados.
Esta cifra de 5.3 millones es aún menos alarmante que la presentada por la Brookings Institution, un centro de investigación estadounidense sin fines de lucro, que plantea que el éxodo venezolano podría elevarse hasta al menos 8.2 millones, incluyendo 3 millones que están repartidos por el mundo.
De cumplirse los pronósticos del instituto de Estados Unidos, Venezuela se vaciaría perdiendo al menos 25,8% de sus habitantes en uno o dos años. Una crítica situación creada por el presidente Nicolás Maduro, quien no ha podido frenar la hiperinflación ni ha podido hacerle frente a la crisis política y humanitaria que atraviesa la nación.
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