Meghan Markle perdió la primera batalla legal contra el editor del Mail on Sunday, Associated Newspapers Limited (ANL), al que demandó por publicar la carta que ella misma escribió a mano y envió a su padre Thomas Markle en 2018 antes de su boda con el Príncipe Harry.
El juez a cargo del caso desestimó tres puntos de la demanda que presentó Markle y ahora tendrá que pagar por los costos judiciales cerca de 67.000 libras. Sin embargo, esta es la primera de las batallas en los tribunales.
El juez aún tiene que decidir sobre el resto de los puntos que contiene la demanda presentada en el Tribunal de Londres. Uno de ellos es, por ejemplo, que no se haga público el nombre de cinco amigas de Markle, que la defendieron en un artículo en la revista People.
Por ahora, los cinco nombres se mantienen bajo anonimato; sin embargo, podrían salir a la luz porque la parte contraria solicita que comparezcan como testigos y cuenten la versión de lo ocurrido y si Meghan Markle sabía o no de que ellas iban a hablar para la publicación.
Asimismo, los duques de Sussex interpusieron esta semana otra demanda, esta vez en California, contra otros medios por unas fotografías que le tomaron a su hijo Archie en su propia casa y sin el consentimiento de los padres.
La pareja presentó la demanda la semana pasada en el Tribunal Superior del Estado de California, Condado de Los Ángeles, por «intrusiones graves» a la privacidad del hijo de ambos.
En la demanda también alegaron que drones y helicópteros entraron en la privacidad del espacio aéreo de su residencia.
La pareja no busca un «tratamiento especial» y solo procura el derecho a estar tranquila en su hogar, tal como garantizan las leyes de California, según la demanda.
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