Europa soporta este viernes la última jornada de temperaturas extremas de una ola de calor que ha anotado registros históricos en países como Bélgica, Alemania, Luxemburgo, Holanda y Francia.
En Bélgica, las altas temperaturas se cobraron este 26 de julio su primera víctima, una mujer de 66 años de edad que murió mientras tomaba el sol en la región costera de Middelkerke. En Granada, España, un hombre de 85 años de edad falleció ayer por el calor, debido a una exposición prolongada al sol durante un paseo.
La Organización Meteorológica Mundial indicó que este episodio, además, tendrá fatales consecuencias ambientales pues podría afectar la capa de hielo de la isla danesa de Groenlandia, la cual ha perdido 160.000 millones de toneladas en superficie este mes.
El portal europeo www.meteoalarm.eu anunció el nivel rojo por temperaturas extremas a Bélgica y Croacia. Además informó que habría tormentas en la región alemana de Kreis Euskirchen, en el oeste del país.
La ola de calor ha dejado registros insólitos en algunas ciudades europeas, como en París, este 25 de julio, donde se alcanzaron los 42,6 grados centígrados, una temperatura récord. En Madrid la máxima alcanzó los 40,7 grados, en junio.
La sofocación, que llegó a comienzos de semana a Francia, activó la alerta roja en 20 departamentos y agravó, además, los problemas de contaminación por ozono en el área metropolitana de la capital, donde se prohibió la circulación de los vehículos más contaminantes desde el martes.
Bélgica superó también el jueves, por tercera vez en 2 días, su temperatura máxima histórica, al marcar 41,8 grados, un registro que pulverizó la marca alcanzada solo unas horas antes, 40,6, según datos del Real Instituto Meteorológico que prevé que las temperaturas se desplomen el fin de semana hasta 10 grados.
SNCB, compañía nacional de trenes belga, tuvo que suspender el servicio de 27 ferrocarriles que carecían de aire acondicionado como medida preventiva, y las autoridades insistieron en sus recomendaciones, en especial la hidratación en niños y mayores.
Italia vivió hoy su pico más alto de calor, con 14 ciudades del norte y centro del país con temperaturas próximas a los 40 grados, como Turín, Milán, Brescia, Génova, Florencia, Perugia, Bolzano, Bologna o la capital, Roma. No obstante, se prevé que la situación cambie en las próximas horas con la entrada de un frente frío procedente del Atlántico, que dará un alivio y bajará los mercurios en la península, pero que dejará frecuentes temporales y lluvias.
En Alemania, las temperaturas se mantuvieron inusualmente altas en puntos del «Land» de Renania del Norte-Westfalia, donde estaba previsto que se alcanzaran los 40 grados, según el Servicio Meteorológico Alemán, pero cederán paulatinamente en el resto del país a partir de esta tarde.
La llegada este viernes de una perturbación desde el Atlántico hará descender las temperaturas de manera paulatina en toda Europa durante el fin de semana; no obstante, los servicios meteorológicos han avisado de lluvias intensas y fuerte aparato eléctrico.
En Francia, las tormentas se desplazarán desde el suroeste y norte del país hacia el este, con precipitación abundante y fuertes rachas de viento, indicó el servicio meteorológico francés Météo-France, en Alemania los frentes llegarán a hoy a última hora y se extenderán a lo largo del sábado y domingo por el oeste, sur y este del país, según los pronósticos del DWD.
La perturbación llegará a Italia el sábado y afectará especialmente a las regiones septentrionales y los Alpes, aunque se extenderá progresivamente hacia regiones del centro del país, como la Toscana o el Lacio, según fuentes de Protección Civil.
En Reino Unido, las tormentas han causado retrasos y cancelaciones de vuelos en el aeropuerto de Heathrow, el de mayor tráfico de Europa, que se suman a los efectos causados por el calor en los trenes, que tuvieron que reducir ayer su velocidad ante el temor de deformaciones en las vías.
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