Los hechos del domingo en la mañana en Macuto, estado Vargas, no pueden ser calificados de invasión armada, afirmó la presidenta de la ONG Control Ciudadano, Rocío San Miguel.
En entrevista para el programa Al día con Sergio de VPI TV, San Miguel dijo que elementos recuperados como licencias de conducir, tarjetas bancarias o una factura odontológica restan credibilidad a que haya sido una invasión armada extranjera.
Dijo que le llama la atención que, tomando en cuenta que fue una supuesta incursión extranjera, no haya sido la Fuerza Armada Nacional Bolivariana la institución que se pronunció primero sino el ministro de Interior y Justicia, Néstor Reverol, y que fuera la FAES el cuerpo que actuó.
La institución castrense venezolana apareció horas después con el ministro de Defensa Vladimir Padrino López a la cabeza.
Otro aspecto que para San Miguel genera dudas es la zona elegida para el presunto ataque: «Macuto no parece ideal para este tipo de incursión (…) No está cerca de ningún centro de poder que presuntamente podría ser tomado por los invasores».
Sin embargo, la presidenta de Control Ciudadano reiteró que sí hay descontento en la FANB y que nunca antes se habían visto tantas detenciones de militares como en la actualidad o solicitudes de baja.
«Eso da cuenta del profundo malestar que hay en la FANB, que se desprofesionaliza, que está buscando el título ahora no solo de unión cívico-militar sino policial (…) Hay problemas de estabilidad muy profundos en el sistema político-militar de Venezuela», dijo.
Respecto a un supuesto contrato firmado entre la oposición venezolana y el militar retirado estadounidense Jordan Goudreau para realizar una incursión militar, San Miguel dijo que el sentido común le dice que esto no tiene credibilidad.
«Lo que se ha podido ver del famoso contrato no indica que esto sea verdad. Ahora, todo es posible en Venezuela, es lo que hemos aprendido en estos últimos años», expresó.
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