Funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) reprimen a los ciudadanos que acompañaban a las gandolas que cargan la ayuda humanitaria dirigida hacia Venezuela.
Luego de que pasaran los cinco camiones por el puente de Ureña, los agentes lanzaron bombas lacrimógenas. Las detonaciones se escuchan desde la frontera colombiana y se han reportado varios heridos por perdigones, entre ellos un niño menor de edad.
Sonia Medina, diputada a la Asamblea Nacional, informó que las gandolas con el cargamento continúa al frente de la frontera colombo-venezolana y que no se moverán del lugar hasta que puedan ingresar.
Los ciudadanos en el lugar reiteraron su apoyo a pesar de la cantidad de las continuas bombas lacrimógenas que lanzan los agentes de la PNB. Muchos de ellos retocedieron para respirar pero aspiran volver a apoyar el ingreso.
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