El gobierno provisional de Bolivia está preocupado porque el Congreso no ha sesionado para establecer las normas electorales y llamar a comicios generales en el plazo establecido, ante lo cual anticipó que aguardará dos días antes de hacer la convocatoria por decreto.
Ha transcurrido una semana desde que la senadora Jeanine Áñez asumió la Presidencia interina de Bolivia, con un plazo constitucional de 90 días para llamar a elecciones, así lo recordó el ministro interino de la Presidencia, Jerjes Justiniano a la prensa.
“Existe preocupación porque no tenemos una ley electoral modificatoria del Régimen Electoral y eso no depende del Ejecutivo, depende del Legislativo que no puede sesionar, que no puede funcionar”, señaló Justiniano.
También dijo que cada día que pasa es un día menos del plazo que tienen. Esto preocupa al gobierno interino. Justiniano aclaró que el mando provisional no busca prorrogar su estadía.
Consultado sobre la posibilidad de que el gobierno interino llame a elecciones mediante un decreto, indicó que es una probabilidad pero está comoe última opción.
“Queremos seguir esperando la decisión, que esto sea parte de la Asamblea Legislativa”, expresó Justiniano.
Nuevo órgano electoral
Además de llamar a nuevos comicios, el Legislativo también tiene que elegir a los nuevos vocales del órgano electoral para que se encarguen de llevar adelante el proceso.
Bolivia está sumida en una grave crisis política y social desde las elecciones del pasado 20 de octubre, con denuncias de fraude electoral por la reelección de Evo Morales.
La Organización de Estados Americanos advirtió en un informe graves irregularidades en los comicios y Morales renunció el 10 de noviembre presionado por los militares.
Áñez asumió dos días después la Presidencia interina de Bolivia, tras activar como senadora el mecanismo sucesorio tras la renuncia de Morales y de todos los que constitucionalmente estaban habilitados para reemplazarlo.
Algunos gobiernos califican la renuncia de Morales como un golpe de Estado y desconocen la Presidencia interina de Áñez. Otros dan su respaldo mientras otra parte de la comunidad internacional aboga por el diálogo sin tomar partido.
La Iglesia católica boliviana, la Unión Europea y las Naciones Unidas han hecho esfuerzos para propiciar un diálogo entre los detractores y afines a Morales. Mientras, la OEA también envió a una delegación para contribuir a la pacificación del país.
El partido de Morales, Movimiento al Socialismo, convocó sesiones para este miércoles en las Cámaras de Diputados y Senadores, donde son mayoría de dos tercios, para tratar el tema de las nuevas elecciones en el país.
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