El célebre pintor Jackson Pollock creó sus obras más emblemáticas no con un pincel, sino vertiendo pintura sobre el lienzo desde arriba, tejiendo filamentos sinuosos de color en obras abstractas.
Un equipo de investigadores que analiza la física de la técnica de Pollock demostró que el artista tenía una gran comprensión de un fenómeno clásico en la dinámica de fluidos, aunque no lo conociera.
En un artículo publicado en la revista Plos One, los investigadores muestran que la técnica de Pollock parece evitar intencionalmente lo que se conoce como inestabilidad en espiral. Es decir, la tendencia de un fluido viscoso a formar rizos y bobinas cuando se vierte sobre una superficie.
La técnica
“Como la mayoría de los pintores, Jackson Pollock pasó por un largo proceso de experimentación para perfeccionar su técnica. Lo que estábamos tratando de hacer con esta investigación es averiguar a qué conclusiones llegó Pollock para ejecutar sus pinturas de la manera que quería. Nuestro principal hallazgo en este documento fue que los movimientos de Pollock y las propiedades de sus pinturas eran tales que evitaba este enrollamiento de inestabilidad”, manifiesta Roberto Zenit, profesor de la Escuela de Ingeniería de Brown y autor principal del artículo.
La técnica de Pollock generalmente implicaba verter pintura directamente de una lata o a lo largo de un palo sobre un lienzo horizontalmente extendido en el suelo. A menudo se conoce como técnica de goteo, pero eso es un poco inapropiado en el lenguaje de la mecánica de fluidos, dice Zenit.
En mecánica de fluidos, gotear sería dispensar el fluido de una manera que haga pequeñas gotas en el lienzo. Pollock evitó en gran medida las gotas, a favor de filamentos ininterrumpidos de pintura que se extienden por el lienzo.
Para entender exactamente cómo funcionaba la técnica, analizaron un extenso video de Pollock en el trabajo. Midieron cuidadosamente qué tan rápido se movía y qué tan lejos del lienzo vertía sus pinturas.
Después de reunir datos sobre cómo actuaba Pollock, los investigadores utilizaron una configuración experimental para recrear su técnica. Así, depositaron pintura usando una jeringa montada a diferentes alturas sobre un lienzo que se mueve a diferentes velocidades. Los experimentos ayudaron a concentrarse en los aspectos más importantes de lo que Pollock estaba haciendo.
“Podemos variar una cosa a la vez para poder descifrar los elementos clave de la técnica”, señala Zenit. “Por ejemplo, podríamos variar la altura desde la que se vierte la pintura y mantener la velocidad constante para ver cómo eso cambia las cosas”, agrega.
Los resultados
Los investigadores descubrieron que la combinación de la velocidad de la mano de Pollock, la distancia que mantenía del lienzo y la viscosidad de su pintura parecen estar destinadas a evitar la inestabilidad del enrollamiento.
Cualquiera que vertió un líquido viscoso, tal vez un poco de miel sobre pan, probablemente vio cierta inestabilidad en espiral. Cuando se vierte una pequeña cantidad de líquido viscoso, tiende a acumularse como un rollo de cuerda antes de exudarse a través de la superficie.
En el contexto de la técnica de Pollock, la inestabilidad puede provocar que los filamentos de pintura formen rizos cuando se vierten de la lata. Algunas investigaciones previas concluyeron que las líneas curvas en las pinturas de Pollock eran el resultado de esta inestabilidad. Sin embargo, esta última investigación muestra lo contrario.
“Lo que encontramos es que movió su mano a una velocidad suficientemente alta y una altura lo suficientemente corta como para que no se produjera este enrollamiento”, apunta Zenit.
Zenit dice que los hallazgos podrían ser útiles para autenticar las obras de Jackson Pollock. Demasiados rizos apretados podrían sugerir que una pintura estilo goteo no es un Pollock. El trabajo también informaría sobre otros entornos en los que los fluidos viscosos se estiran en filamentos. Es el caso de la fabricación de fibra óptica. Pero Zenit dice que su principal interés es la forma fascinante de explorar preguntas en mecánica de fluidos.
“Me considero un mensajero de la mecánica de fluidos. Esta es mi excusa para hablar de ciencia. Es fascinante ver que los pintores son mecánicos realmente fluidos, aunque no lo sepan”, concluye.
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