El ex general Hugo Carvajal, que estuvo al frente de la contrainteligencia venezolana con el fallecido presidente Hugo Chávez, se negó este jueves a ser extraditado a Estados Unidos por delitos de narcotráfico.
En su vista de extradición en la Audiencia Nacional española, en la que la Fiscalía ha apoyado su entrega a Estados Unidos, Carvajal afirmó que se siente amenazado.
Cree que sufrirá represalias si es extraditado al país norteamericano, pero también a Venezuela.
«Yo en la justicia de Estados Unidos no confío, el solo hecho de que me hayan hecho lo que me hicieron es suficiente motivo. No voy a tener derecho a la defensa de ningún tipo y a promover pruebas tampoco», afirmó ante el tribunal.
También señaló que todos los que podrían testificar en su favor en un proceso contra él «están o sancionados o con la visa retirada en Venezuela».
«Otros están presos en México y otros muertos, como es el caso del presidente Chávez, que era quien me daba las órdenes directas a mí», añadió.
«A Nicolás Maduro lo conozco lo suficiente y sé de lo que es capaz», afirmó.
Detención en España
Carvajal, de 59 años de edad, fue detenido en España el pasado 12 de abril en virtud de una orden de arresto de Estados Unidos.
Este país le reclama por haber querido «inundar» su territorio con toneladas de cocaína.
Alega que Carvajal introducía la droga con ayuda de la cúpula de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia.
Carvajal dijo que si se encontró con jefes de esa guerrilla fue para ayudar en su traslado a Venezuela y luego a Cuba para sus reuniones en el marco del proceso de paz.
Aseveró que todo esto bajo las órdenes de Chávez y con conocimiento del gobierno de Colombia.
«La responsabilidad que yo tuve con ese grupo, de buscarlos en la frontera y llevarlos a Caracas y a Cuba, y viceversa, era una cuestión de seguridad netamente mía», justificó.
Destacó que en los vehículos no había droga.
«Es absurdo que se ande diciendo que yo andaba con grupos armados en Venezuela protegiendo a las FARC. Claro que los andaba protegiendo, porque era mi responsabilidad», agregó.
Ante ello, tildó las acusaciones de la justicia de Washington como «meras especulaciones que no tienen ningún tipo de asidero».
«Tiene conocimientos para dar datos internos»
Su abogada, María Dolores de Argüelles, alegó persecución política para negarse a la entrega e intenciones subrepticias de la justicia estadounidense.
«Es público y notorio que las relaciones entre Estados Unidos y Venezuela no son buenas desde que Chávez entró en el poder», recordó.
«El único fin que tiene Estados Unidos para perseguir a Carvajal es que él tiene conocimientos suficientes para dar datos internos de lo que pasa en el gobierno de Venezuela», añadió.
Argüelles precisó que si Carvajal es extraditado no podrá defenderse porque el material sobre las FARC está clasificado en Venezuela.
Además, los testigos «están muertos, presos o no tienen posibilidad de salir de Venezuela».
«Es una artimaña bastante inteligente: te dejo sin ninguna arma de defensa y vienes a lo que yo quiero, a que me des información», resumió la abogada.
El fiscal
El fiscal Luis Ibáñez dijo que está a favor de la extradición y recordó que no le reclama Venezuela, sino Estados Unidos, por lo que rechazó el alegato de persecución política.
En la demanda de Washington «se concretan con suficiente precisión los hechos, las actividades delictivas por las cuales se le reclama».
Subrayó además que se cumplen los requisitos para que sea extraditado.
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