Luis Leonel León – Diario Las Américas – El profesor y sacerdote jesuita defendió la necesidad de que el próximo gobierno que se instale en su país «tiene que apostar a fondo al talento, pues talento es lo que sobra en Venezuela», aseveró
“En Venezuela tenemos el agravante de que somos una sociedad donde el origen de la riqueza está, o estaba, concentrado en el petróleo. El Estado le dice a la gente que el petróleo es del pueblo, pero el representante de ustedes soy yo, el Estado, y el petróleo es estatal”, dijo el Padre Luis Ugalde durante el foro Presente y futuro de nuestras sociedades civiles, efectuado en la Universidad Internacional de la Florida. Y recalcó que se trata de un fenómeno anterior al chavismo:
“Lo que pasa es que Chávez en lugar de corregirlo lo llevó al extremo y le dijo al pueblo: Si somos el país más rico del mundo y ustedes son pobres, entonces cómo se explica eso. Yo les voy a explicar. Ustedes son pobres porque entre su riqueza, que la tiene que administrar el Estado, y ustedes, hay tres bandidos: los gringos, los ricos y los partidos políticos corruptos. Apóyenme a mí que voy a acabar con los tres y les voy a dar a ustedes. Chávez incluso les dijo que no tenían que aumentar la productividad, que eso lo hacen los pobres países que no tienen riqueza. Y que como nosotros ya tenemos la riqueza, lo que había que hacer era repartir, que gobernar bien es repartir la riqueza”.
“De manera que el señor Adam Smith [refiriéndose a La riqueza de las naciones, la obra más célebre del economista y filósofo escocés, considerado uno de los mayores exponentes de la economía clásica] estaba totalmente equivocado cuando explicó que la riqueza de las naciones no es la cantidad de oro y plata que tienen, sino lo que produce el conjunto de bienes y servicios de calidad que la gente sea capaz de lograr. Eso será allá, dicen los chavistas. Pero en Venezuela el oro y la plata es el oro negro y el gobierno es el distribuidor. Yo los quiero mucho. Esa fue la prédica, con la suerte de que el petróleo pasó de valer menos de 10 a más de 100 dólares el barril”, subrayó el sacerdote vasco-venezolano. Y agregó:
“Y entonces [Chávez con el asesoramiento y la mano de obra del régimen cubano] empezó a inventar misiones, y la gente decía ‘parece que es verdad lo que este señor dijo, mira a mi mamá, mira a aquél otro, anótate en esta misión, anótate en la otra’. Y llevó al extremo la producción y ahí viene el marxismo. Marx dice que el origen del mal está en la apropiación privada de los medios de producción, y que la felicidad y el paraíso en la tierra vendrán cuando tomemos el Estado, establezcamos la dictadura del proletariado para barrer con lo anterior, eliminemos la propiedad privada de los medios de producción, y entonces ya no haya ni mío ni tuyo sino una abundancia compartida fraternalmente. Ese es el paraíso en la tierra, según Marx. De manera que el hambre, el desabastecimiento y la paralización de la producción en Venezuela no es una casualidad, no es una metida de pata de Maduro, sino que está en el diseño mismo del sistema”, explicó el coordinador de educación de los jesuitas de Venezuela.
El Padre Ugalde aseguró que Nicolás Maduro se siente acorralado y que para intentar engañar al pueblo “dice que está contentísimo con las elecciones de gobernaciones, que se las tragaron y todavía están en deuda con ellas. A Capriles le da quince años de inhabilitación. Los otros, como Leopoldo López, están en la cárcel, presos políticos. Y ahora le dice a la oposición, tranquilos, retomamos el diálogo, vamos a elecciones regionales. Nadie le cree. La gente sabe que es una trampa. Y el último recurso es la Constituyente. Si la oposición es mayoría, vengan a barrer conmigo”.
El sacerdote llamó la atención sobre el artículo 347 de la Constitución venezolana, donde se expresa que el pueblo de Venezuela es el depositario del poder constituyente originario.
“Y entonces Maduro dice: Yo en nombre del pueblo de Venezuela convoco. Y claro, eso está en la Constitución. ¿Pero cuándo le ha dicho el pueblo de Venezuela que convoque? ¿Dónde está la delegación que el pueblo le ha hecho a usted? A no. A él no le hace falta eso. Es la encarnación del pueblo de Venezuela, tal como Stalin era la encarnación del pueblo ruso, o Fidel del pueblo cubano. Esa es la situación”, señaló el demócrata jesuita, individuo de número de la Academia Venezolana de Ciencias Políticas y Sociales.
Ugalde destacó que con las manifestaciones pacíficas “los demócratas le decimos a Maduro que es un usurpador, y a los militares les decimos que son unos usurpadores porque están violando la Constitución. Y la apelación a los militares, que la hizo muy bien Julio Borges, es que a la hora de la consciencia, tienen que decidir si apoyan la Constitución y los derechos humanos o si están con el dictador que los está violando”.
El padre Ugalde denunció que las elecciones que quieren imponer en Venezuela son “de corte fascistas, corporativas, donde no es el voto universal y secreto sino esas corporaciones, que no están definidas en la Constitución, las que van a decidir el gobierno y entonces así el régimen cocina todo a como le convenga”.
“Buscan apelar a la Constituyente originaria porque les da, según ellos, el derecho de eliminar todo lo constituido. Es decir que desde el primer día pueden eliminar la asamblea nacional, eliminar las gobernaciones y llamarles de otra manera y hacer otras circunscripciones, y todo porque es la Constituyente originaria. En ese modelo, donde el jefe es jefe del partido, jefe del gobierno y jefe del Estado, como lo fue Stalin y todos los demás, tenemos esa distorsión”, advirtió el religioso, quien durante diez años (1998-2008) fue presidente de la Asociación de Universidades SJ (jesuitas) de América Latina (AUSJAL). Y añadió:
“Pero en este momento tenemos una ventaja, y es que hay unidad, hay una emotividad alta tanto de los que están fuera como los que estamos dentro, y hay unas verdades a las cuales se ha llegado, hay consenso en torno a esa verdad: esto es una dictadura y todo lo que haga el dictador, aunque apele o no a la Constitución, es para perpetuar la dictadura”.
Educación-producción
Según el misionero, uno de los graves errores del chavismo y de los totalitarismos en general, ha sido desatender y desvirtuar el verdadero sentido de la educación y la necesidad de producción:
“El gobierno ha dicho que el rentismo fracasó y entonces ahora somos un país productor. Y país productor significa cultura productiva. Chávez dijo, solemnemente, que productividad era una mala palabra, la palabra neoliberal que utilizan los empresarios para sacarle a las personas más plusvalía, y cuanto más vagos seas menos plusvalía te pueden sacar”, lamentó el director del Centro de Reflexión y de Planificación Educativa (CERPE). Y añadió:
“Tenemos que salir de la cultura rentista. Seguiremos siendo un país con petróleo, pero no un país petrolero. Y eso, por ejemplo, se ve en el sistema educativo, donde el gobierno eliminó los exámenes y obligó a los profesores a pasar a los muchachos en la materia. Eso significa apostar a la renta. Ahora hay una serie de universidades piratas que son peores que la peor universidad pública o privada que había. Y no importa, le dicen a los estudiantes, tienes el diploma y vienes de la universidad bolivariana y yo te doy empleo. Ese tipo de cosas no funciona. Si detrás del diploma no hay un contenido, una capacitación de verdad, no puede haber productividad. Eso es lo que explica que fulano de tal fue Ministro del Interior, Ministro de agricultura, Ministro de Salud. En cada oficio duró seis meses. Debe ser un genio. Pues no. Es un incondicional del partido. Más nada. El profesionalismo ha sido despreciado”.
Para Ugalde, quien ha sido profesor en diferentes instituciones, “Venezuela tiene potencial pero es pobre, porque la suma de bienes y servicios que producimos es pobre. Si nos metemos eso en la cabeza, usted apuesta a su talento, pues no hay otra. Como están apostando los venezolanos que trágicamente se han tenido a que ir de su país, a hacer lo que sea, pero apostando a su talento, su creatividad, su productividad. Y ese cambio cultural que es sumamente importante, el paso de la cultura rentista a la cultura productiva”.
El sacerdote defendió la necesidad de que el próximo gobierno que se instale en su país “tiene que apostar a fondo al talento, pues talento es lo que sobra en Venezuela. Yo llevo treinta años en un barrio pobre y he visto, por ejemplo, a un muchacho que salió del rancho, que yo le di la primera comunión, llegar a la universidad y ahora tener un importante puesto de administración en la universidad. Talento hay. Lo que hay que crear es la fe en el talento y no esa misericordia mal entendida, de pobrecito, claro, no tiene papá, y vive en un rancho y no tiene computadora, ay, pues le vamos a dar una rebaja. No. Démosle oportunidad. Y esto es un cambio enorme que debe desarrollarse en los individuos y en el liderazgo. Educación y producción”.
Educación de calidad para todos
El secretario de educación de los jesuitas para América Latina, reveló que ninguno de los ministros de este gobierno, “que detesta la educación privada y que proclama que la educación debe ser pública, tienen a sus hijos en un liceo público. Los tienen en la educación privada. ¿Por qué? Porque para los pobres que nunca han tenido educación una educación de tercera categoría vale, pero para los ministros no, sus hijos van a la mejor escuela o los mandan fuera del país, pues ahora están en el poder y tienen dólares”.
De ahí que para el educador, lo más importante es generar una enseñanza de calidad para todos apostando al talento: “Si apostamos al talento de los muchachos y los contagiamos con los maestros para que descubran su talento, eso se dispara. Como pasa en el baseball. Hay cien peloteros en Estados Unidos. No son ricos, son hijos de pobres, pero desde chiquitos dijeron yo quiero estar allá. Entonces no necesita dinero. Lo que necesita es la convicción y poner la meta alta. Eso es lo que tenemos que hacer en la educación”.
Sentido de lo público y participación ciudadana
Otro de los llamamientos del Padre Ugalde en su conferencia fue la necesidad de que los venezolanos entiendan que lo público es suyo: “El venezolano hoy está en las calle porque considera que lo público es suyo y se lo están quitando. Después que salgamos de esta, hay que seguir con la mentalidad de que lo público no lo volvemos a entregar. A cualquier partido que trate de apoderarse de lo público y lo llame bien común, pero diga que el Estado es suyo, la sociedad tiene que decirle: No, el Estado no es suyo, usted es un mandadero de la sociedad. Pero eso sólo es verdad en la medida en que participamos y discutimos”.
Puentes y alianzas de solidaridad social
Según el teólogo y sociólogo, crear puentes y alianzas de solidaridad social, es otra de las urgencias de la sociedad venezolana:
“Hay una mala prédica en Venezuela de que en los barrios pobres todos son delincuentes y el que no es porque no ha tenido la oportunidad. Esa es la caricatura. Y en el otro lado, al pobre le han predicado sistemáticamente que están en la pobreza porque el otro come completo. Así no se puede construir una sociedad”, afirmó el presidente entre 1985 y 1988 de la Confederación Latinoamericana de Religiosos (CLAR).
“Yo lo he experimentado con miles de muchachos, que yendo a los barrios se entusiasman porque descubren que no son delincuentes, que son personas con sus mismas inquietudes, sus mismos deseos de ir a la universidad. Por supuesto que hay delincuentes, pero descubren personas. Y al revés, el barrio descubre que con estos jóvenes que los vienen a asistir tienen servicio psicológico gratuito, servicio jurídico gratuito. ¿Y quiénes son? Muchachos de la universidad apoyados por profesionales que vienen al barrio. Ah, entonces no es lo que nos predica el gran profeta [en referencia a Maduro]. Y en el nuevo gobierno eso tiene que quedar claro. El que gobierne tiene que saber que gobierna para todos”, puntualizó el intelectual.
“Y eso en Venezuela, en una primavera ciudadana, se tiene que multiplicar. Con estos cuatro elementos: la educación-producción, la educación de calidad para todos, el sentido de lo público y la participación ciudadana, y los puentes y alianzas de solidaridad social, podemos lograr una revitalización tremenda de la sociedad civil postpetrolera, aunque tengamos petróleo”, concluyó
Noticias Relacionadas
El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!
Apoya a El Nacional