El general Oswaldo Hernández, sentenciado en 2015 a siete años de cárcel por el delito de instigación a la rebelión, fue diagnosticado con cáncer ya en estado de metástasis tras 11 meses sin recibir atención médica.
Médicos habían recomendado el traslado de Hernández, que se encuentra recluido de la unidad de procesados militares del Centro Penitenciario de Occidente, estado Táchira, a un centro médico en la Caracas, para practicarle exámenes de descarte, lo cual no se concretó.
El oficial, ex viceministro de Educación Superior para la Defensa, fue llevado al Hospital Militar de San Cristóbal, presentando un cuadro febril y constantes dolores en su cara y allí recomendaron su remisión al Hospital Militar de Caracas para hacerle análisis específicos por cuanto además registró inflamación en ganglios del cuello. Este traslado se hizo efectivo hace un mes.
“Por los exámenes se logró determinar que a estas alturas, lamentablemente, tiene metástasis”, relató Raquel Sánchez, coordinadora de Foro Penal en Táchira.
“Lamentablemente ante la falta de respuesta del Estado como garante del derecho a la salud y la vida de los privados de libertad, en este aspecto, vuelve a fallar por no haber previsto una situación en la que la defensa, a cargo del Foro Penal, estaba tramitando una medida humanitaria”, agregó Sánchez.
Explicó que en este momento se adelantan los preparativos para la posible aplicación de radioterapia y quimioterapia para frenar la afección que padece Hernández.
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