La vicepresidenta de Ecuador, Verónica Abad, quien mantiene un conflicto con el presidente Daniel Noboa, podrá reincorporarse a su puesto luego de que un fallo judicial anuló este lunes una suspensión de cinco meses, al considerar que se habían violado sus derechos constitucionales.
«Se dispone al ministerio de Trabajo de la República del Ecuador dejar sin efecto la resolución del sumario administrativo» con el que se suspendió a Abad por el supuesto abandono injustificado de sus funciones mientras se desempeñaba como embajadora en Israel, dijo la jueza Nubia Vera, que denunció haber sufrido presiones y amenazas para fallar en sentido contrario, en unos comentarios recogidos por AFP.
Al retomar su puesto, Abad quedaría en condiciones de reemplazar a Noboa mientras él realiza su campaña para la reelección de cara a las elecciones del 9 de febrero, según lo establece la Constitución.
Antes de que se diera a conocer el fallo, Noboa expresó en una entrevista radial el lunes por la mañana que fue «un error» haber elegido a Abad como su compañera de fórmula.
La sentencia sobre la vicepresidenta de Ecuador
La sentencia de «inmediata» aplicación también dispone que la ministra de Trabajo, Ivonne Núñez, ofrezca disculpas públicas y que se le pague a la vicepresidenta los salarios que dejó de recibir debido a la sanción administrativa.
En septiembre, debido al aumento del conflicto en Oriente Medio, Abad fue trasladada a Turquía por razones de seguridad.
El Ministerio de Trabajo justificó su suspensión alegando que la funcionaria debía haberse instalado en Ankara antes del 1 de septiembre, pero llegó cinco días después.
«Vamos (…) a analizar junto a mi equipo de trabajo en el despacho vicepresidencial» la sentencia, expresó Abad a periodistas al final de la audiencia, a la que acudió portando una bandera de Ecuador.
Damián Armijos, abogado de la vicepresidenta, declaró a la prensa que «ha quedado absolutamente claro» que Abad «nunca cometió la falta de la que la acusaron y que el ministerio de Trabajo irrespetó sus propias reglas, que el ministerio de Trabajo violó la presunción de inocencia y actuó con una serie de irregularidades».
Al final de la audiencia, la jueza Vera denunció presiones por parte de funcionarios del poder judicial para fallar contra la vicepresidenta.
«Son más de diez años que tengo al servicio de la justicia y es la primera vez que he sido coaccionada, amenazada, amedrentada», dijo Vera a periodistas.
Relató que los funcionario le entregaron una memoria USB con una sentencia redactada previamente para «favorecer un capricho de negar una acción de protección».
«Estos hechos los denuncio porque mi carrera está en juego», expresó la jueza.
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