Este año, el continente americano ha enfrentado incendios forestales particularmente intensos, según indicó este jueves el Servicio de Monitoreo Atmosférico de Copernicus, parte del programa espacial de observación de la Tierra de la Unión Europea (UE).
Las condiciones de sequía presentes en gran parte del continente agravaron el riesgo de que se produjeran grandes incendios forestales, señaló la institución con sede en Bonn (Alemania).
En las zonas tropicales al norte del Ecuador, la temporada de incendios de este año fue especialmente activa entre enero y abril, con una notable intensidad en Venezuela y en el estado brasileño de Roraima. Además, en Bolivia, las emisiones provocadas por los incendios aumentaron durante los primeros meses del año.
Temporada de incendios
En la región del Pantanal, el humedal más grande del mundo, se registraron incendios forestales sin precedentes, con «graves consecuencias para el ecosistema», según Copernicus en unas declaraciones de EFE.
En el estado brasileño de Mato Grosso do Sul, que abarca gran parte de la región, se estimaron emisiones de 3,3 megatoneladas de carbono entre mayo y junio. Este registro es el más alto en los 22 años de recopilación de datos y casi triplica el récord anterior establecido en 2009.
En la temporada de incendios en México y América Central, entre marzo y mayo, también se registraron emisiones por encima de la media y en concreto para Nicaragua las emisiones de carbono fueron las más altas detectadas para ese periodo.
Lo mismo ocurrió con Bolivia, donde las emisiones anuales fueron las más altas desde que se elabora la estadística y donde en algunas zonas, como pasó también con Brasil, los incendios degradaron severamente la calidad del aire durante periodos prolongados de tiempo.
En el caso de Norteamérica, se vieron afectadas en especial zonas del oeste de Canadá, como la Columbia Británica, de modo que al término de la estación de incendios el país registró las segundas emisiones más altas por detrás tan solo de 2023.
«América del norte y del sur fueron las regiones que más destacaron en términos de emisiones globales por incendios en 2024. La escala de algunos de estos incendios fue de nivel histórico, especialmente en Bolivia, el Pantanal y partes de la Amazonía», declaró Mark Parrington, investigador del Servicio de Monitoreo Atmosférico de Copernicus.
«El impacto ha tenido repercusión a escala continental en la calidad del aire, con altas concentraciones en superficie de partículas y otros agentes contaminantes que persistieron durante varias semanas», agregó.
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