Las políticas públicas ambientales deben aplicarse también a los procesos administrativos, cuyo mayor exponente suele ser la organización burocrática del Estado que contribuye a la contaminación a través de dos efectos principales:
- El uso de papel (tala de árboles): la estrategia de desmaterialización significa que los archivos físicos deben ser digitalizados (escaneados) y posteriormente destruidos; no por la destrucción en sí misma, sino por la renovación de lo viejo.
- El uso de la tinta: El gobierno electrónico deberá mejorar esto. El tóner es altísimamente contaminante, así como los cartuchos de tinta. Ya sea a nivel de envase, como distribuidos sobre el papel como resultado de la impresión o la fotocopia. La combinación del punto anterior del papel se hace más relevante cuando este está impreso por la carga de tinta que tiene, tanto la negra como la de colores.
La desmaterialización proviene de la digitalización, que convierte todo lo tangible, como una hoja de papel impresa por tinta, a un medio digital. Además de la seguridad y veracidad que conlleva este proceso, también genera un ahorro de costos y previene la contaminación ambiental. La desmaterialización surge con la digitalización y apoyado con Internet, que es uno de los inventos más disruptivos en la vida de las personas, sobre todo de las instituciones.
Hay dos dimensiones: la física y la virtual. El comercio digital, como todo lo que se deriva de este, es muy importante, por ejemplo, las compras en Amazon o Mercado Libre o las transacciones en criptomonedas.
Todo aquello que se convierta en algo físico automáticamente dispara los costos a la estratósfera; por lo tanto, se necesitará mejorar el ancho de banda para tener más comercios digitales. De lo contrario, estaríamos navegando en una tabla de surf mala.
En otro orden de ideas, la disposición final de la basura es la punta de lanza de cualquier estrategia ambiental del país. Se da en los rellenos sanitarios, en capas ordenadas para procesar los desechos orgánicos, separándolos de los desechos sólidos, como el metal, el plástico y el vidrio. Deben ser procesados por empresas profesionales de reciclaje y procesamiento.
En el otro extremo está la producción de basura (residencial, comercial e industrial), que debería organizarse según el tipo de utilización en los procesos de reciclaje. Podría llegarse a la paradoja de que las empresas de basura le paguen a las residencias, comercios e industrias, para que les “vendan” sus desechos.
Todo dependerá de la estrategia que la nueva etapa de Venezuela decida para el manejo de su basura, la cual ha ido degradándose en cantidad y en calidad de su composición; ha ido aumentando el componente orgánico (de uso limitado en reciclaje) en detrimento de lo sólido. Con el relanzamiento y expansión de la economía venezolana, esto último debería cambiar y convertirse en una oportunidad más de desarrollo económico.
Cuando se vive en un lugar alto de Caracas, o se tiene la oportunidad de volar sobre la ciudad en la mañana, se observa una capa negra sobre el valle, que es como un residuo del día anterior y al día siguiente la corriente de vientos la arrastrará, haciendo que nuestro pulmón vegetal, el Ávila, no nos funcione verdaderamente como tal.
Habría que pensar en el tema de la contaminación y terminar de sacar las plantas industriales de Caracas. Podemos pensar en impuestos ambientales, crear una institución que los cobre y alimente un fondo con propósito especializado ambiental. Tendría que existir toda una estrategia ambiental que termine aterrizando en lo económico.
La conciencia se crea como resultado del proceso castigo-incentivo. Y que el castigo pueda terminar siendo de prisión o económico. Los que no cumplen, no tienen un incentivo. Hasta que la educación los alcance, tiene que existir castigo incluso para los presidentes de las empresas. Es un tema mucho más importante de lo que parece, es con lo que tenemos que convivir todos los días, en un ambiente de confianza y civilización.
Todo lo anterior asume que el 10E habrá un cambio de gobierno con el respaldo popular que hará que, en este tipo de cosas que dependen de la gente y de rescatar una cultura que evite la depredación, sean posibles; porque la gente desde sus casas comenzará a torcer el rumbo de la historia y volver a ponerla en perspectiva de libertad, armonía y progreso.
Noticias destacadas
- EFE: Telefónica Venezolana pagará 85 millones de multa para cerrar un caso de soborno en Estados Unidos. Monitoreamos: Telefónica pagó sobornos al régimen de Maduro para recibir dólares preferenciales. Fiscal general adjunta, Nicole M. Argentieri, jefa de la División Penal del Departamento de Justicia: “Telefónica Venezolana sobornó a funcionarios del gobierno venezolano para participar en una subasta gubernamental a través de la cual intercambió bolívares venezolanos por dólares estadounidenses. Telefónica Venezolana ocultó los pagos ilícitos mediante la compra de equipos a precios inflados a dos proveedores que pagaron los sobornos en nombre de la empresa”.
- EFE/El Mundo: Interpol ignora la alerta roja lanzada por el chavismo contra Edmundo González. Un portavoz de Interpol ha confirmado este viernes a la Agencia Efe que «está prohibido cualquier uso de nuestro sistema por razones políticas».
- EFE: Alvin Holsey asumió como nuevo jefe del Comando Sur de Estados Unidos (SOUTHCOM), sucediendo a la general Laura Richardson, quien se retira tras casi cuatro décadas de servicio. Su objetivo. Con la meta de reforzar alianzas regionales.
- EFE: Sheinbaum sugerirá al G20 redirigir 1% del gasto armamentista a la pobreza y las mujeres (siempre con el dinero de los otros… debería comenzar con su ejemplo haciéndolo en México).
- La Ceiba: La victoria electoral de Trump fue contundente y no fue cerrada, como vaticinaban las encuestas, que se pelaron duro. A diferencia de la primera elección, esta vez los norteamericanos eligieron a Trump con plena conciencia de quién es, con todas sus virtudes y defectos. Además, le dieron amplio poder: la Presidencia, el Senado y, probablemente, también el Congreso. La trifecta pues. Eso, aunado con que en la Corte Suprema de Justicia los republicanos tienen una mayoría de 5 a 4 (con tres de esos cinco jueces nombrados por el propio Trump), confiere al nuevo presidente un poder no visto desde la Segunda Guerra Mundial. El mandato es claro.
- Israel ganó un poderoso aliado. En Latinoamérica, gobernantes y líderes de derecha como Milei, Bukele y Bolsonaro, celebraron en grande, mientras los de izquierda tratan de disimular su tristeza. Trump puede hacerle la vida muy difícil a la presidenta mexicana, que se las da de más radical que su antecesor, AMLO. Veamos si le habla a Trump con el lenguaje duro que la caracteriza.
Lo que no fue noticia (y debería serlo)
- Que lo de Telefónica, y cientos de otras compañías que hicieron lo mismo… era un tema de supervivencia empresarial; y ahora sale como un tema especial: señores, eso era diario. Pero claro… lo que no sale es que otros cientos de empresas no aceptaron hacerlo… y en la actualidad son un orgullo para sus trabajadores, accionistas, proveedores y clientes, y para el resto del país decente a partir del cual reconstruiremos nuestra querida Venezuela.
- O que el tema de las alertas rojas de interpol por razones políticas se contrapesa con las que muchos funcionarios chavistas tienen en el mundo en su contra en la misma Interpol. La diferencia es que las de ellos no son por razones políticas sino por delitos concretos que el resto del mundo reconoce y va a castigar; y que solo aquí adentro, en Venezuela, “de eso no se habla” … ya pronto se hablará, y mucho.
- Ni que con el inmenso poder con el que Trump asumirá la presidencia habrá que prepararse para medidas contundentes sin que tenga que preocuparse por el Congreso o por la Corte… solo por los límites que le imponen la Constitución y las leyes. Entonces… imagínense si va a negociar con Maduro… este hombre viene por todo. Porque, además, no necesita ser políticamente correcto.
- Tampoco que en realidad asusta el que un solo hombre tenga tanto poder como para dar vuelta la realidad inercial planetaria a la que venimos acostumbrados. Pero bueno… “eso es lo que hay”, y habrá que convivir con sus decisiones, así todas no sean de nuestro agrado… Es que es asimétricamente muy, pero muy poderoso.
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