¿Autosuicidio?

Tomando la frase del expresidente Carlos Andrés Pérez, con la que titulo este artículo, que fue una ocurrencia genial en ese momento, quiero hacer un análisis de la reunión convocada por el presidente de la Asamblea Nacional Jorge Rodríguez con los representantes de los partidos y movimientos políticos del país, con el propósito de cerrar todo espacio a la democracia y crear el andamiaje jurídico a la tiranía, para no seguir haciéndolo de facto. Se hicieron presentes: el Partido Socialista Unido de Venezuela (Tania Díaz y Francisco Ameliach), Primero Venezuela (Miguel Ponente y Luis Parra), Cambiemos movimiento ciudadano (Oliver Ponce y Timoteo Zambrano), Esperanza por el Cambio (Aníbal Sánchez y Alfonso Campos), Alianza del Lápiz partido popular (Erick Ondarroa y Antonio Ecarri), Movimiento Ecológico de Venezuela (Lois Maldonado y Alejandro Aguilera), Movimiento Electoral del Pueblo (Deinnys Quijada y Gilberto Giménez), Alianza por el Cambio (William Camacho y Ciro León), Organización Renovadora Auténtica (Mairelys Urbáez y Oswaldo Zamora). Por la democracia social, Podemos (Didalco Bolívar y Yeisi Orozco). Por la Unidad Popular Venezolana (Henry Hernández y Erika Pierina Rojas), Avanzada Progresista (Luis Augusto Romero y Bruno Gallo), Movimiento Somos Venezuela (Vanesa Montero y Orlando Camacho), Soluciones por Venezuela (Claudio Fermín y Miguel Vásquez), Fuerza Vecinal (Gustavo Duque y Manuel Ferreira), Copei (Miguel Salazar y Juan Carlos Alvarado).

El Partido Comunista de Venezuela (Henry Parra y Zoilo Arostegui), Acción Democrática (Bernabé Gutiérrez y José Gregorio Correa), Patria para todos (Lenia Medina y Carlos Martínez), Voluntad Popular (Guillermo Antonio Luces y Miguel Figueroa Jiménez), Movimiento Republicano (Mario Valdez y Alonso Maldonado), Bandera Roja (Pedro Veliz y Eder Puerta), Movimiento de Integridad Nacional -MIN- (Ramón Odreman y José Medina), Derecha Democrática Popular (José Francisco Contreras y Ángela Petrizzo), Partido Verde de Venezuela (Heryck Rangel y Carlos Alvarado), Movimiento Futuro Venezuela (Rodolfo Crespo y Asia Villegas), Enamórate Venezuela (José Antonio España y José Andrés Tovar), Alianza Política Asamblea de Renovación y esperanza -AREPA- Daniel Ceballos y Juan Carlos Palencia) Confederación Nacional Democrática -CONDE- (Agustín Berríos y Gloria Phino), Unidad visión Venezuela (Omar Ávila y Luis de Los Santos), Unión Nacional Electoral (Carlos Melo y Humberto Berroteran), Centrados en la Gente (Robert Rodríguez), Movimiento Primero Justicia (Ángel David García y Aurelio Armas).

El martes pasado Jorge Rodríguez aseguró que, al finalizar el año, Venezuela contará con leyes, reglamentos y normas electorales ajustadas a los nuevos tiempos. Es una expresa confesión de que lo contenido en nuestra Constitución y el resto del ordenamiento jurídico ya no le permite al régimen ejercer absoluto control sobre los ciudadanos y sobre todo doblegar su esencia y voluntad democrática. He señalado los partidos o grupo de electores y sus representantes allí presentes, porque nadie y menos ellos pueden aparentar que desconocen lo que la casta que gobierna persigue, instaurar en nuestro país un régimen de partido único, que no es otra cosa que Fascismo, totalitarismo, dictadura, comunismo, porque eso es cuando se cercenan los derechos civiles y políticos a los ciudadanos.  Convencido estoy de que cada quien tiene el derecho a pensar como le parezca, pero lo que no se puede aceptar es que aparenten ante la opinión pública ser defensores de la democracia y al mismo tiempo prestarse para una emboscada como la que se está preparando para que el Partido Socialista Unido de Venezuela le dé paso al Partido Socialista Único de Venezuela, convirtiéndose en un monopolio de las ideas y del comportamiento ciudadano. Quienes se han hecho parte de esta comparsa, seguramente en gran medida comenzaron a trajinar el mundo de la política en nuestra era democrática, por lo tanto, tienen suficientes parámetros para medir cómo se vive en democracia y cómo se vegeta en dictadura. Sumando los grupos participantes en ese monólogo, exceptuando al PSUV, no representan ni siquiera el 3% de quienes acudimos a votar el 28 de julio, por lo que podríamos calificarlos como invitados de piedra, al final se impondrá la voluntad de quienes obtuvieron 30% de los sufragios, porque lo único que persiguen es dar la impresión hacia adentro y hacia afuera que la ¨oposición¨ está de acuerdo con la reforma del ordenamiento jurídico en lo que respecta a la materia electoral y política.

Ninguno de los allí presentes aprovechó la oportunidad para demostrar su verdadera vocación democrática, exigiendo respeto a la soberanía popular expresada el 28 de julio, porque todos ellos saben lo que pasó, seguramente los pocos testigos que pudieron habilitar les habrán informado lo mismo, que en todas partes triunfó de forma holgada Edmundo González Urrutia y eso no lo podemos perdonar; en política se puede ser ingenuo, pero no imbécil. De tal manera que la aparente reforma no comprende otra cosa que colocarle la soga al cuello a todos, y en el momento en que alguno se vuelva incómodo, le aprietan el nudo y dirán que se suicidó, porque la mafia actúa de esa manera. Recuerden lo que pasó con Tareck el Aissami y su banda, que le han venido tensando la cuerda no para combatir la corrupción, sino para sacarlo del juego, porque descubrieron que se había convertido en un competidor; la corrupción sigue siendo la misma, pero con otros protagonistas.

A sabiendas de que la verdadera oposición, la que obtuvo más de 7 millones de votos, no asistiría. Jorge Rodríguez les tiró un anzuelo para ver si alguien con necesidad de algún tipo se hacía presente. Pero una vez más quedó comprobado que María Corina Machado, Edmundo González Urrutia y la Plataforma Unitaria, están sólidamente unidos en el logro del respeto a la voluntad popular, es decir, el reconocimiento al descomunal triunfo de Edmundo González Urrutia, y todos dispuestos a llegar hasta el final.

Llama la atención que Jorge Rodríguez habla de nuevos tiempos, precisamente de nuevos tiempos hablaba Hugo Chávez, pero, al parecer a ninguno de los que expusieron sus vidas el 4 febrero de 1992 durante la intentona del golpe de Estado, invitaron para escuchar sus pareceres, para cerciorarse que lo que se ha venido haciendo era lo que perseguían cuando atentaron contra el orden constitucional; o los nuevos tiempos será para sepultar el pensamiento de Hugo Chávez y su grupo de golpistas y solo recordarlo cuando necesiten votos, bueno ya para qué votos si estos fueron suplantados por los fusiles. Lo que no sé es quién será el primero en llegar al suicidio asistido, dándole la razón a CAP.