La justicia peruana ratificó este miércoles la condena de 10 años de prisión a un sacerdote católico por abusar de una niña que servía de monaguilla, a quien hizo «tocamientos indebidos» de sus partes íntimas, informó el Poder Judicial.
«La Primera Sala Penal de Apelaciones de la Corte Superior de Justicia de (la provincia norteña de) Santa confirmó la condena de 10 años de prisión efectiva contra el exsacerdote de la parroquia Nuestra Señora de Guadalupe, Luis Hernán Del Carpio Costa», indicó el Poder Judicial en un comunicado.
El tribunal ordenó la inmediata detención de Del Carpio para que comience a cumplir la pena, tras ratificar su responsabilidad en el «delito de actos contra el pudor en agravio de una menor de edad», añadió.
El sacerdote había sido condenado a esa pena en primera instancia en octubre de 2017, pero apeló. El hecho había ocurrido en 2014 en la localidad norteña de Nuevo Chimbote.
La denuncia contra el religioso provocó que el Vaticano, a través de la Congregación para la Doctrina de la Fe, decretara su separación o «dimisión del estado clerical» en abril de 2016, según el Obispado de Chimbote.
En esa ocasión, el Obispado pidió a la comunidad «perdón por la conducta reprobable» del sacerdote y se comprometió a velar por el bien de «los menores y más desprotegidos».
El religioso fue acusado de delitos contra el pudor por haber realizado «tocamientos indebidos» contra una niña de 12 años, monaguilla en su parroquia.
«La menor le contó a su madre que bajo la excusa de que la esperara (después de la misa vespertina) para llevarla hacia su domicilio la hizo ingresar a una habitación donde le realizó tocamientos» de sus partes íntimas, según el Poder Judicial.
Del Carpio, que alegó inocencia, fue separado como párroco en 2014.
En los últimos años se hicieron públicos en Perú varios casos de abuso sexual contra menores perpetrados por religiosos y laicos que dirigían organizaciones católicas.
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