Tras la alfombra roja de los Oscar y una vez conocidos a los ganadores, llegan las fiestas, y la de Vanity Fair volvió a congregar a numerosos rostros del cine y la moda donde el negro y el plata triunfaron.
Una espectacular Sofía Vergara lució un diseño negro de Oscar de la Renta con tres lazos negros en el corpiño. Poderosa también en negro, Demi Lovato con un generoso escote.
EFE/EPA/NINA PROMMER
La modelo Kendall Jenner eligió un diseño de alta costura de John Galliano para Maison Margiela, un vestido sin costuras de gasa de seda negra que realzaba su figura.
Negro fue también el color de Jessica Lange y el de Elizabeth Banks, una creación ajustada que daba todo el volumen a la manga izquierda.
Anya Taylor Joy apostó por un futurista diseño minifaldero con un tocado de brillantes y dos enormes perlas como pendientes. Pero si hay que destacar una joya sorprendente por su tamaño es la gargantilla de brillantes y esmeraldas de Joan Collins.
Brillos en plata
Una de las triunfadoras de la noche, Emma Stone, posó con su Oscar a Mejor Actriz con un vestido de espejos transparente en plata.
Elsa Pataky también se cambió de vestido y optó por un Rabanne con discos metalizados para la fiesta posterior a la gala. La misma firma fue la elegida por Nina Dobrev, un vestido de la colección Resort 2024 plateado de lentejuelas.
En plata también, Sharon Stone lució un bustier ojos de gato y falda de lentejuelas con volantes laterales en gasa.
De blanco inmaculado apareció la actriz Jennifer Lawrence con un romántico vestido de corte imperio de Dior.
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La modelo Alessandra Ambrosio apostó por un vestido capa en blanco, y en blanco y negro muy estilo charlestón hizo su aparición Diane Kruger.
A pesar de no estar nominada, Margot Robbie decidió que el color de la noche era el dorado, como el Oscar, y acudió luciendo un bodie joya en ese tono que dejaba sus piernas al descubierto.
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Para olvidar, en dorado también, la elección de la modelo Heidi Klum.
El bordado del vestido de Florence Pugh le jugaba malas pasadas al descubrir su pecho según sus movimientos.
La nominada por Anatomía de una caída, Sandra Hüller, escogió un voluminoso Schiaparelli en tono crudo, mucho más sencillo el rosa palo de la británica Emily Blunt.
Rojo intenso de líneas rectas ha sido el diseño elegido por Donatella Versace, el mismo color que el vestido de Rebecca Hall.
Sin apenas maquillaje, Pamela Anderson fue de las pocas mujeres que eligió un vestido estampado, un caftán de Oscar de la Renta, inspirado en vidrieras, compuesto de 20 tonos diferentes.
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