Su amor por Venezuela y el no sentirse representado por ningún actor político del país llevaron al empresario mirandino César Almeida, de 51 años de edad, a incursionar en la política.
En 1996 egresó del Colegio Universitario de Los Teques Cecilio Acosta como ingeniero informático. Cinco años después fundó la empresa Infosotf, C.A, que está ubicada en Caracas, dedicada a desarrollar aplicaciones web, bases de datos, soluciones de BI y prestando servicios de TI.
En asociación con el partido político Unidad Política Popular 89 (UPP89), Almeida formalizó su postulación a la primaria. Asegura poner al servicio del país su experiencia gerencial de más de 20 años de labor.
“Soy un gerente con todas las capacidades y cualidades para tomar las riendas del país y lograr sacarlo adelante”, dijo.
Su plan de trabajo está dividido en siete objetivos fundamentales: recuperar la institucionalidad, desarrollar la infraestructura y economía, garantizar el autoabastecimiento, un futuro energético sólido, fortalecer el sistema bancario, recuperar empresas para el progreso y respeto al Estado de derecho.
Almeida quiere dejar a las generaciones futuras un país próspero, pero señala que eso solo se logrará con el voto masivo: “Yo no quiero una Cuba para mi Venezuela, quiero un país en el que todas las personas puedan tener su casa digna, trabajo, y que puedan salir de vacaciones, puedan darse su gusto, eso es lo que realmente quiero para mi país, yo no quiero un mundo de pobreza”.
—¿Por qué tomó la decisión de incursionar en la política?
—Por amor a Venezuela he decidido incursionar en la política. Ver a Venezuela dando vueltas por un barranco es como ver a mis hijas por ese mismo barranco y no hacer nada, quedarse de brazos cruzados. Venezuela me ha dado tanto, tanto en lo económico, como en lo familiar, profesional y empresarial, que ahora estoy dispuesto a trabajar por Venezuela y devolverle mucho más de lo que ella me ha dado y que podamos sacar a Venezuela del berenjenal donde la han metido.
—¿Tiene alguna preferencia ideológica?
—Soy de centro y aprovecho para decir que en estos momentos quizás el tema no es tanto de ideología. Le hago un llamado a todos esos partidos que dicen ser de izquierda, y que son de derecha, que todos somos necesarios para recuperar el país, tenemos que unirnos de manos porque la única que tiene que salir ganando de todo esto es Venezuela.
—¿Por qué los ciudadanos deben votar por usted?
—Yo le ofrezco a toda Venezuela mi integridad, mi confianza, porque debo decirte que todos los partidos de ahora, y hasta el gobierno, ni con todo el dinero del mundo, van a poder comprar un ápice de integridad y de confianza que el pueblo de Venezuela pueda volver a creer en ellos. Eso va a ser totalmente imposible lograrlo. Entonces le ofrezco a Venezuela no solamente mi integridad, mis principios y mis valores, con los cuales fui formado, sino que luego de ello desarrollé habilidades en lo empresarial y en lo gerencial. Soy un gerente con todas las capacidades y cualidades para tomar las riendas del país y lograr sacarlo adelante; que podamos apuntalarnos como en la década de los cincuenta y los sesenta, como el país latinoamericano que estaba dando pasos hacia verdaderos caminos de desarrollo, y solamente lo vamos a lograr con personas decentes, trabajadoras, que podamos nosotros, en cierto modo, aplicar todos nuestros conocimientos en pro del fortalecimiento de la economía y demás aspectos como en lo político y social del país.
—¿Cómo lograr todo lo que señala? ¿Cuál es su plan de gobierno?
—Luego de todas las reuniones con nuestros asesores, nosotros decidimos e identificamos un plan a seguir que tiene siete objetivos fundamentales. Lo primero es recuperar el Estado de derecho, que tengamos independencia de poderes. Si tú me preguntas qué cosa ha iniciado y culminado este gobierno, la Constitución. Pero no ha habido un gobierno, y me atrevería a decir que en todo el planeta, que haya escrito una Constitución y ese mismo gobierno la haya violado tantas veces como lo ha hecho este gobierno. Lo segundo es recuperar el sistema financiero nacional para verlo otorgando créditos a pequeños, medianos y grandes empresarios, y que todos caminemos por los senderos de la prosperidad. El tercero, recuperar y desarrollar la infraestructura del país: el turismo, el comercio, el sector industrial, las empresas del Estado y el sector agropecuario. Este último sector es fundamental. Nosotros, acá en Venezuela, con los conucos no vamos a salir adelante. Tenemos que hacer un plan nacional de siembra intensivo con el que podamos producir arroz, la caña de azúcar, las caraotas y demás rubros para que seamos un país autosustentable y autosostenible. Por otro lado, elevar la producción de petróleo a 2 millones de barriles diarios a vuelta de 5 años. ¿Por qué 2 millones? Porque no sabemos qué vamos a conseguir en las industrias petroleras actualmente. Todo va a ser detrás de un plan de inversión. Para que todos los venezolanos tengan certeza de lo que les estoy diciendo, número 1: para que seamos autosustentables en el país de combustible, gasoil, necesitamos aproximadamente 1 millón de barriles diarios solo para Venezuela, y si estamos produciendo entre 600.000 y 700.000 barriles, y mientras que le enviamos combustible a Cuba, más lo que se exporta, definitivamente te das cuenta de que es muy pequeña la proporción que se usa para acá y eso se refleja en las calles, en el interior del país que no hay gasolina, gasoil, colas de tres y hasta cuatro días para surtir. Esto es un atraso para el país. Me sorprende y me entristece la cantidad de horas hombres que se pierden porque son colas kilométricas. Ahí hay ingenieros, médicos y muchos profesionales perdiendo su tiempo en una cola. La otra cosa que tenemos que hacer es un llamado o entrar en negociación para devolver todas aquellas empresas que de manera arbitraria fueron expropiadas, y que podamos devolverlas a sus dueños. Un ejemplo es Agropatria, una empresa que llegaba a todo el país con asistencia técnica, maquinarias, insumos para todos los productores nacionales, y hoy en día es una empresa quebrada. Entonces tenemos un sector agropecuario en el piso. Eso es algo que tenemos que recuperar. El séptimo es hacer que se cumplan las leyes y la propiedad privada. Esto tiene que ver con la seguridad jurídica que tenemos en el país porque nadie va a invertir en Venezuela, y mucho menos empresas extranjeras, pensando en que el gobierno les va a expropiar. Solamente con un gobierno serio que llegue al país es que se podrá recuperar la confianza y vendrán esas inversiones extranjeras. Entonces recuperando nuestra situación económica y reactivando nuestro aparato productivo nacional, eso colateralmente va a traer trabajos dignos, sueldos dignos, donde las personas puedan comprar lo que necesiten en el momento y no solamente trabajar por ese salario mínimo del que tanto se habla hoy en día, no. César Almeida va a trabajar no solamente por ese salario digno, sino por el salario acorde al nivel de profesionalismo que tenga la persona. Por ese motivo he dado este paso al frente porque me cansé de los políticos, no me siento representado con ninguno de los candidatos que actualmente tenemos, ni de oposición ni de gobierno. 80% de la población rechaza a los políticos y a los partidos.
—A su juicio, cómo ha sido el trabajo de la oposición en los últimos años, teniendo a Guaidó como líder? ¿Qué opina de Guaidó?
—La gestión de Juan Guaidó, la gestión de la oposición, la veo con resultados muy infructuosos. Se ha cometido un error gravísimo y se los dejé saber con claridad en mi primera reunión con los candidatos y les dije: “El gran error que ha tenido la oposición es haber subestimado al gobierno”. Entonces, al subestimarlos a ellos, pensando en que “Maduro vete ya”, en que “Chávez ya se va”, pasaron 24 años. Juan Guaidó definitivamente tuvo una oportunidad de oro para cambiar el sistema político y no lo logró; lo que se han generado son escándalos de corrupción como Monómeros en Colombia, que él mismo admitió que había administrado millones de dólares. Entonces, cómo es posible que nosotros digamos que la culpa está solamente en el gobierno, no, porque también está en la oposición. Por ese motivo yo salí al ruedo porque si tú quieres influenciar al sistema, definitivamente tienes que acceder al poder y accediendo al poder es que nosotros vamos a poder cambiar el rumbo del país.
—¿De alguna manera se ha sentido excluido del proceso de primaria? ¿Cree que tiene el mismo apoyo que ha recibido los otros candidatos?
—La respuesta es no. Creo que eso de inclusión-exclusión es una cuestión de contexto. De verdad que he salido a hacer mi trabajo y lo que he conseguido en los distintos estados que he recorrido es algo que yo pensé que era un cliché, lo de 80% de rechazo, y es totalmente cierto: las personas en el interior rechazan a los políticos. Al principio, admito, tuve un gran temor, pero al llegar allá, y ellos, al ver que es una persona nueva, que no conocen mi cara, se han abierto conmigo.
—De acuerdo con estudios de opinión, la participación se moverá entre 8% y 10% del padrón electoral actual. ¿Cómo ve el ambiente para las primarias? ¿La ciudadanía está dispuesta a participar?
—No debería decir lo que diré, pero debo hablar con la verdad: me he encontrado con una situación en donde 8 de cada 10 venezolano no saben de la elección primaria. Eso es algo muy malo para este proceso. César Almeida, a través de sus redes sociales, ha hecho campaña para incentivar a los ciudadanos. Realmente son grandes desafíos los que tenemos que superar y Venezuela tiene que entender que con la apatía no vamos a cambiar al gobierno. Tenemos que pasar de ser pasivos a estar muy activos en buscar la solución que está en que cada quien salga a votar porque el voto masivo es la única garantía de éxito, en caso contrario estamos raspados. Hay algo que me preocupa mucho, es que me he conseguido con un panorama que no es bueno; hago el llamado a mis hermanos venezolanos: muchas personas esperan que las maquinarias políticas los lleven a los centros de votación y después los devuelvan a sus casas. Los candidatos que tienen grandes maquinarias se aprovechan de eso. Tenemos que cambiar esa manera de pensar y votar desde la razón y no desde el corazón o de la necesidad que te esté ocurriendo en ese momento.
—Gracias al populismo de los últimos 20 años, para nadie es un secreto que parte de la sociedad se ha acostumbrado a las regalías y bonos. ¿Cómo hará para enfrentarse a eso de ganar las presidenciales?
—Te puedo decir con toda certeza que el mejor bono que puede tener un trabajador o pensionado es tener un sueldo digno, que le alcance para comprar todo lo que necesite, en el momento en que lo necesite, y que por lo menos pueda ahorrar 10% de lo que gana. En el pasado, con unos sueldos dignos los venezolanos pudieron criar a sus hijos, hacerlos llegar a profesional, y que en esa Venezuela de oportunidades que hubo, que yo la aproveché, es la manera en como nosotros vamos a revertir toda esta situación. Esos que dicen que ser rico es malo, es falso.
—¿Respalda las primarias con o sin asistencia técnica del CNE?
—El hecho de que el CNE se haya pronunciado de manera extemporánea y que luego de unos 100 días llegara como que si nada ha pasado, yo quiero creer que la propuesta del CNE viene cargada de buenas intenciones, pero dificulto mucho que eso sea así. La gente que está en el gobierno tiene secuestrado todos los poderes que actúan en función de las órdenes que da el partido del gobierno, y esas son las cosas que nosotros tenemos que cambiar. De cara a que el CNE quiera cambiar la fecha, nosotros, dentro de la elección primaria, con mucha verdad y honestidad te digo, sí tenemos debilidades, sobre todo en los centros de votación porque hay 38% que van a estar en espacios públicos y eso es una vulnerabilidad. Ahora mismo, en las reuniones que hemos tenido con los candidatos, hemos decidido aceptar la asistencia del CNE, pero solo en lo que son los centros de votación y el Plan República. De lo demás nosotros nos encargamos y estamos preparados para hacer eso. Que si el gobierno nos quiere cambiar para el 19 de noviembre, ya nosotros le hemos dejado saber cuáles son nuestras opiniones a la Comisión Nacional de Primaria y es la Comisión Nacional de Primaria quien va a decidir una cosa o la otra. Respaldo unas primarias con o sin el CNE bajo estas circunstancias que estoy diciendo. En este momento necesitamos los centros de votación, pero ojo, no es que ellos no los estén dando porque son buenos; es que nosotros tenemos el derecho, como venezolanos. El hecho de que los tengan secuestrados no significa que es de ellos. Nosotros podemos exigir que nos garanticen los centros de votación. Lo que no aplaudo es que quieran cambiarnos las reglas del juego a estas alturas y que eso desvirtúe todo el proceso que ya tenemos.
—¿Qué opinión tiene sobre las inhabilitaciones de otros candidatos a las primarias? A su juicio, ¿deberían participar en las elecciones internas o retirarse?
—Los inhabilitados son un plomo en el ala que tiene este proceso, y César Almeida aceptó esto desde el 15 de agosto cuando la Comisión Nacional de Primaria dejó saber su cronograma. En ese momento, solo estaba Capriles inhabilitado, pero unos meses después se dejó saber que María Corina también estaba inhabilitada y luego hubo un tercer inhabilitado. Ese es un problema grave que tenemos. Yo le pasé un documento a los candidatos para reunirnos, y solo me respondió la mitad. Desde acá les hago un llamado a los candidatos que no han respondido: tenemos que sentarnos, por el bien a nuestro país, porque si gana un inhabilitado y se postula para el 2024, ya todos sabemos que los voceros del gobierno han dicho que no se van a poder inscribir. Lo que yo quiero evitar es que eso se convierta en una desmotivación, en niveles de frustración altísimos de todos los que nos movimos a votar este 22 de octubre y que llegado ese momento todo nuestros esfuerzos paren en esa letrina donde nos tiene metidos el gobierno. Por esta razón le hago un llamado a los candidatos a que nos reunamos y le busquemos la solución a este problema. El nepotismo tenemos que desactivarlo por completo porque nos puede traer grandes problemas.
—¿Cuál fue la respuesta que obtuvo de los candidatos que le respondieron?
—La respuesta fue estar de acuerdo con que pudieras conversar en el procedimiento que les presenté. Unos estuvieron parcialmente de acuerdo, otros decían que le podíamos buscar la vuelta. Pero hace falta la opinión de todos. Esta es una decisión donde solamente va a estar permitida lo que salga de 100% de las personas; es decir, es una decisión multilateral, no solo de la mitad de los candidatos. Si gana un inhabilitado las elecciones del 22, ya sabemos que tenemos que resolver un problema; y si nosotros no lo resolvemos, se irá convirtiendo en algo mucho más grande y será algo muy perjudicial para el país. Recobrar la confianza de esos hermanos venezolanos será algo muchísimo más complejo y complicado porque dirán: “Estos políticos no se ponen de acuerdo”, y tendría toda la razón. Nosotros tenemos que dar el ejemplo de que nos estamos reuniendo y que vamos a buscar solución a este problema.
—Hasta ahora lo que se está planteando es como opción uno llegar hasta el final con el candidato inhabilitado peleando en la calle para que lo habiliten. La opción dos sería que el que gane le dé paso al candidato habilitado que quede en mejor posición. ¿Qué opina?
— Hay un dicho que dice que el que es picado de culebra no puede ver un bejuco porque se asusta. Venezuela ha sido picada por culebras muchas veces y nosotros no podemos decir eso porque, ¿quién no estuvo en una marcha más grande que la que hubo en abril de 2002? ¿Quién no supo del respaldo internacional que obtuvo Guaidó? Y con todo eso, ¿qué hemos logrado aquí en Venezuela? Tendríamos que ser muy ilusos para pensar que ganará un inhabilitado y habrá marchas y la Contraloría de la República le va a quitar la inhabilitación para que luego se inscriba en el CNE. No. Tenemos que hablarle de manera muy objetiva a Venezuela porque no le podemos estar pintando pajaritos preñados, porque lograremos más desconfianza y desprecio del pueblo a los políticos. Ese no es el camino, lo correcto es buscar los canales regulares para que podamos marcar una pauta. Ya de frases estamos cansados los venezolanos. Nos pintaron un “por ahora”, que nos desembocó en la letrina en la que estamos ahora. Luego nos hablaron de un “camino”, y ese camino siguió fundiéndonos en la letrina. Después nos dijeron “vamos bien”, pero bien hundidos en esa letrina y ¿vamos a seguir en lo mismo, engañando al pueblo de Venezuela? No, señor. Nosotros tenemos que ir con estrategias objetivas y claras, para que todo el mundo las conozca. La única manera de que el pueblo pueda hacer algo es a través del voto.
—¿Cree que en una elección presidencial, con garantías mínimas, el gobierno pierda independientemente de quién sea el candidato opositor?
—Eso es complejo. Hay unas estadísticas que hablan de que Maduro goza de menos de 10% de aceptación, pero este gobierno es astuto. Tiene la maquinaria, los poderes públicos, tiene el dinero como para convertir ese 10% en 40% y hasta 50%. Los que están en el poder harán todo lo posible para mantenerse en el poder. Entonces no creamos en eso porque este gobierno está jugando de manera muy seria y nosotros estamos trabajando de manera muy ingenua. Ellos saben cada paso que está dando la oposición. Esa gente tiene un departamento estratégico completo y que cada día estudia cada paso de los candidatos. Entonces ellos saben cuáles son nuestras debilidades. Desde ese punto de vista, te puedo decir que no podemos subestimar al gobierno. Ellos, con mucha facilidad, pueden convertir sus derrotas en victorias y eso lo han demostrado en varias oportunidades. Tenemos que abrir los ojos para ver que estamos peleando contra un monstruo, contra un grupo de personas que no juegan limpio y que cambian las reglas en el momento que ellos lo deseen, de acuerdo a sus conveniencias; y nosotros tenemos que tener eso muy claro.
—¿Qué opina de esos candidatos que decidieron no participar en las primarias y se inscribirán directo en las presidenciales de 2024?
—Que el pueblo de Venezuela juzgue ese tipo de actitudes. Todos sabemos que en la división está el peligro y la oposición se dividió en dos toletes: el que confió en la CNP y el otro que piensa en un consenso. Evidentemente ya hemos visto algunos candidatos que se retiraron de la CNP e inclusive anunciaron que van solos en el 2024. Esa gente tiene que pensar que en la división es donde vamos a seguir metidos en la letrina. Yo los invito a que busquemos la manera de unirnos para obtener un solo candidato porque esa será la única garantía de éxito en las elecciones de 2024. Con que vayan dos candidatos de oposición ya estamos mal, ya las posibilidades de perder son altísimas. El gobierno solamente tiene a los milicianos que votan y que son 4 millones de personas aproximadamente. Basta con que les digan: “Si no votas, no te doy la bolsa” para que esos 4 millones de personas salgan a votar. Ese es el llamado que le hago a esos hermanos venezolanos milicianos y a todos los del sector público, que no se dejen engañar. Reciban su bolsita, pero al momento de votar voten por un cambio político en el país porque a esa gente hay que sacarla. Para que pasemos de la Venezuela de hoy a la Cuba de hoy es solo cuestión de tiempo.
—¿Cómo ve a Venezuela de ganar el oficialismo en 2024?
—Más sumergida en la letrina. No vamos a tener opción. Los niveles de corrupción que se viven en este momento, todos los antivalores, se van a incrementar. Muchas personas que están enchufadas les va a convenir que Maduro siga en el poder. Tenemos que pensar en el futuro. ¿Qué país le vamos a dejar a nuestros hijos, a las futuras generaciones? Yo quiero dejarles un país próspero, yo no quiero una Cuba para mi Venezuela, quiero un país en el que todas las personas puedan tener su casa digna, trabajo, y que puedan salir de vacaciones, puedan darse su gusto, eso es lo que realmente quiero para mi país, yo no quiero un mundo de pobreza.
—¿Quiere agregar algo más?
—Quiero enviarle un mensaje a todos mis hermanos venezolanos: Todos somos necesarios para reconstruir y echar adelante al país. Todos tenemos que trabajar por un mejor futuro para las generaciones futuras. Nosotros tenemos que unirnos en un solo voto que vaya en pro de la reconstrucción y del desarrollo nacional y que con el cambio que vamos a dar en un mediano plazo, en el gobierno de César Almeida, vamos a ver regresar a nuestros hermanos venezolanos y aquí los vamos a esperar con los brazos abiertos. Pero eso lo vamos a hacer solo con el voto masivo porque es la única garantía de éxito que tenemos aquí en el país.
El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!
Apoya a El Nacional