Seguramente cualquier persona, incluidos aquellos que no son entusiastas de la tecnología, han tenido contacto alguna vez con un smartwatch o pulsera inteligente. Se trata de estos dispositivos que usualmente fingen como accesorios tecnológicos y que cuentan con un sinfín de funcionalidades, como el poder monitorear la actividad física, recibir y enviar mensajes, sincronizar contactos, entre muchas otras.
Pues bien, no contentos con estos dispositivos, las compañías están buscando ir más allá y ahora parece que surgirá una nueva tendencia: anillos inteligentes, sí, estos accesorios que usualmente hacen parte de la joyería tradicional y que ahora vienen para aportar un estilo tecnológico, sumados a la pulseras y los relojes inteligentes, éstos hacen parte de una categoría denominada “wearables”.
Con un mercado que alcanzará un valor de 23 millones de dólares para el año 2030, no es de extrañar ver cómo las marcas se interesan por la fabricación de estos nuevos dispositivos, considerados el futuro de los accesorios tecnológicos.
Impulsados principalmente por startups, los anillos inteligentes vienen elaborando su industria desde hace un buen tiempo. De hecho, estos aparatos existen desde hace más de 10 años, pero no fue con la aparición de patentes y los anuncios de grandes empresas tecnológicas que comenzaron a cobrar interés a nivel mundial, es solo cuestión de tiempo para que esta nueva moda abarque todas las estanterías y avisos publicitarios.
Si bien hace una década representaba todo un reto poder llevar a cabo la fabricación de un wearable, y más cuando se trata de un anillo, lo cierto es que con el interés de empresas como Apple y Samsung se está demostrando que es posible fabricar anillos inteligentes en cantidad. Además, el interés de las personas por seguir monitoreando su salud y la forma física, hace que esta clase de dispositivos sean un atractivo para las marcas.
¿En qué consisten los anillos inteligentes?
Se trata de anillos que usualmente estamos acostumbrados a ver, pero que en esta ocasión tienen funciones tecnológicas añadidas; responder a gestos específicos, recibir notificaciones por medio de vibración, y replicar acciones a través de comandos, son algunas de las novedades que traen estos dispositivos.
Si bien estos pueden brindar una solución a la dependencia de los celulares, lo cierto es que ambos se complementarán. Incorporar un chip y sensores en un dispositivo tan pequeño como un anillo no es fácil, y allí es donde las marcas tienen el mayor reto.
Ahora bien, para qué servirán los anillos inteligentes. Los usos más comunes que se le pueden dar están enfocados en la categoría de salud y fitness. Pero existen otros apartados como los pagos digitales, la seguridad en línea y el control de acceso a ciertos espacios, así como la posibilidad de realizar acciones a través de movimientos.
Y es que, si bien hay que esperar a que el mercado tome una base, ya están apareciendo las primeras marcas que están incursionando en este mercado. Empresas como GO2SLEEP, Oura, Motiv y THIM, son pioneras en la industria. Todos con funciones limitadas, pero apenas representan el inicio de lo que podría ser la nueva revolución de accesorios tecnológicos.
Las grandes marcas que están incursionando en la industria
Si bien existen varias marcas de anillos inteligentes, la más conocida es Oura, una compañía dedicada a la fabricación de estos dispositivos y que únicamente cuentan con la función de monitorear el sueño. Pero todo parece indicar que se acerca un nuevo y gran competidor, se trata de Samsung, quien recientemente dejó entre ver sus intenciones de lanzar un anillo inteligente.
Actualmente, Samsung cuenta con un catálogo de wearables establecido, entre los que se incluyen su categoría de relojes inteligentes y pulseras, pero que muy pronto crecerá con la llegada de los anillos inteligentes al portafolio de accesorios.
Se trata del “Galaxy Ring”, un nombre que la compañía registró en octubre del 2022, como deja ver el portal Android Authority, y que ya está legalmente constituido en Reino Unido y Corea del Sur, además de otras marcas que ha registrado como “Samsung Circle” y “Samsung Index”.
En los documentos que describen los registros hechos por la compañía se explica que se tratará de un dispositivo preparado para rastrear, detectar, reconocer, monitorear y recopilar datos biométricos y fisiológicos, además de administrar la información recopilada. Como se mencionó anteriormente, lo más seguro es que Samsung requiera de una aplicación a través de un celular para poder hacer funcionar el anillo, recopilando así la información de una manera más precisa.
Lo último que se conoce sobre el “Galaxy Ring” es que ya tiene el proveedor que se encargará de su fabricación. Según el medio coreano The Elec, la producción estará a cargo de la compañía japonesa Meiko, donde actualmente se fabrica el Galaxy S23.
Por ahora, esto es lo único que se sabe de la incursión de Samsung en la industria de los anillos inteligentes, donde marcas como Oura y Jackcom cuentan con modelos que ya se pueden adquirir por un precio que empieza en los 300 dólares.
Finalmente, en el año 2021 surgieron los rumores de que Apple trabajaba en su propio anillo inteligente. Sin embargo, ese producto aún no se ha materializado y tan solo se ha llegado a ver en patentes. Tiene sentido que la compañía de la manzana esté explorando este sector, pues con la llegada de Vision Pro los anillos inteligentes serían un complemento interesante para este dispositivo que todavía es poco explorado.
Por Stiven Cartagena, productor multimedia, comunicador social y periodista con énfasis en el cubrimiento de temas tecnológicos.
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