Rusia afirmó este jueves que el presunto ataque de drones ucranianos contra el Kremlin que asegura haber desbaratado fue orquestado por Estados Unidos, que rechazó cualquier implicación.
El miércoles, Moscú aseguró haber interceptado dos drones ucranianos dirigidos contra el Kremlin y denunció un intento de asesinar al presidente Vladimir Putin, acusaciones negadas por Kyiv y cuestionadas por Washington.
«Los esfuerzos de Kyiv y de Washington para negar cualquier responsabilidad son totalmente ridículas. Las decisiones de este tipo de ataques no se toman en Kyiv, sino en Washington», dijo a la prensa el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
«Kyiv solo hace lo que le dicen», continuó. «Washington debe entender claramente que sabemos esto», añadió.
Ucrania desmintió cualquier implicación en el incidente, uno de los más espectaculares que se le ha imputado desde el inicio del conflicto. E incluso acusó a Moscú de haber preparado un «montaje» para justificar una posible escalada de su ofensiva.
La Casa Blanca negó también cualquier implicación en el supuesto ataque y calificó las declaraciones de Peskov de mentiras.
«No tenemos nada que ver con eso», dijo John Kirby, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, en la cadena MSNBC. «Pura y simplemente, Peskov está mintiendo», añadió.
Ataques «sin precedentes»
Peskov dijo que las medidas de seguridad en el recinto fueron «reforzadas» y la televisión pública mostró a Putin reunido con el ministro de Desarrollo Económico, Maxim Reshetnikov en el Kremlin.
Las autoridades también reforzarán el dispositivo de seguridad en Moscú con motivo del tradicional desfile militar que se prepara para celebrar el 9 de mayo, Día de la Victoria sobre la Alemania nazi en 1945.
Ante los riesgos de seguridad alegados desde hace semanas por las autoridades, numerosos eventos vinculados a esta fiesta fueron anulados, especialmente en las regiones cercanas a Ucrania.
La diplomacia rusa denunció el jueves una ola «sin precedentes» de «actividades terroristas» y «sabotajes» ucranianos en su territorio.
Además del presunto ataque contra el Kremlin, dos refinerías de petróleo resultaron golpeadas por drones en el suroeste de Rusia, cerca de Ucrania.
Y en la anexada península de Crimea derribaron un dron cerca de la base aérea rusa de Sebastopol, informó Mijaíl Razvozhaiev, gobernador de esa localidad, en Telegram.
El incremento de este tipo de ataques ocurre en un momento en que Kyiv asegura estar culminando sus preparativos para una gran contraofensiva.
Rusia ocupa todavía alrededor del 18% del territorio en el sur y el este de Ucrania. La ofensiva de Kyiv busca expulsar a sus tropas más allá de sus fronteras.
El jefe de la diplomacia de la Unión Europea, Josep Borrell, pidió a Rusia que no usara el supuesto ataque al Kremlin como pretexto para intensificar su ofensiva militar en Ucrania.
Zelenski visita la CPI
Las autoridades ucranianas también informaron de un ataque con drones rusos sobre su territorio. Según las fuerzas aéreas, Moscú «lanzó 24 drones Shahed 136/131», de los que pudo abatir 18.
Entre los objetivos de la acción figuraba la capital Kyiv, atacada por «tercera vez en cuatro días», dijo el jefe de las fuerzas de la defensa antiaérea de la capital, Serguii Popko.
Todos los aparatos resultaron abatidos, precisó. Algunos restos cayeron en las calles de tres barrios de Kyiv y dañaron algunos vehículos, pero sin causar víctimas, agregó.
Otras localidades de Ucrania sufrieron ataques el jueves, entre ellas la ciudad portuaria de Odesa, en el suroeste, blanco de «15 drones» de los que 12 «resultaron abatidos», dijo el portavoz del gobierno regional, Serguii Brachuk.
Entre estos aparatos, «tres golpearon un albergue» sin provocar víctimas, indicó.
La víspera, la ciudad meridional de Jersón, donde se anunció un toque de queda de 58 horas a partir del viernes, sufrió bombardeos «masivos». Estos dejaron 23 muertos y 46 heridos, según el último balance oficial publicado este jueves.
De visita inesperada a la Corte Penal Internacional en La Haya, el presidente ucraniano Volodimir Zelenski reclamó la creación de un tribunal especial para que Rusia rinda cuentas por su «crimen» de agresión.
«Debería haber responsabilidad por este crimen. Y esto solo puede aplicarlo el tribunal», dijo Zelenski a los diplomáticos y funcionarios de la CPI, que emitió una orden de arresto contra Putin en marzo.
Noticias Relacionadas
El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!
Apoya a El Nacional