América Latina tiene potencial para cambiar las reglas del juego en el campo de la Inteligencia Artificial.
Hay muchas razones para afirmarlo. Una de ellas es que el ecosistema empresarial de la región y su talentosa mano de obra tecnológica están integrando a sus procesos de trabajo las promesas de la innovación.
Otra es el tamaño de la región. Con países como México y Brasil, que cuentan con una población de 120 y 214 millones de habitantes, respectivamente, existe un vasto mercado por explotar.
Según el director general de Techstars Miami, Andrés Barreto, América Latina tiene un inmenso potencial para emerger como líder en el desarrollo de la Inteligencia Artificial, gracias a su sólido ecosistema empresarial y a su experimentado talento tecnológico.
En 2022, las startups de Inteligencia Artificial de la región recibieron más de 229 millones de dólares en inversiones, lo que forma parte de una tendencia al alza que dura ya una década, según PitchBook.
Barreto también señala que la pandemia ha acelerado la búsqueda de soluciones tecnológicas, lo que resultó en una inversión récord de más de 874 millones de dólares en startups latinoamericanas de IA en 2021.
Es en este escenario que las empresas latinoamericanas deben mostrar su verdadero potencial en IA para atraer más inversión y establecerse como líderes en este campo.
Inteligencia Artificial
El bombo publicitario que rodea a la Inteligencia Artificial ha atraído una atención significativa de los inversores de todo el mundo, incluida América Latina.
Sin embargo, es esencial que los inversores lo eviten y se centren en casos de uso práctico que puedan tener un impacto significativo en la vida de las personas y las empresas.
La Inteligencia Artificial puede utilizarse para mejorar la atención sanitaria, optimizar la logística y el transporte, y mejorar el servicio al cliente proporcionando recomendaciones y soluciones personalizadas, por mencionar sólo algunos sectores.
Sin embargo, los inversores deben reconocer que no es una solución mágica que pueda resolver todos los problemas. Es una herramienta que puede utilizarse para alcanzar objetivos específicos, y su eficacia depende de cómo se aplique.
La tecnología está siendo cada vez más utilizada por las empresas para mejorar la eficiencia y la productividad en sus operaciones en América Latina.
En Brasil, por ejemplo, solo 41% de las organizaciones implementan activamente la Inteligencia Artificial, según el Índice Global de Adopción de IA 2022 de IBM.
Según Joaquim Campos, vicepresidente de Automatización, Datos e IA de IBM América Latina, la Inteligencia Artificial tiene diversas aplicaciones, como mejorar la ciberseguridad, optimizar la toma de decisiones en tiempo real en redes 5G, facilitar iniciativas de sostenibilidad y permitir la automatización inteligente.
Estas implementaciones pueden reducir los tiempos de respuesta, desbloquear más capital para el crecimiento de la red, crear operaciones más eficientes y mejorar la gestión de la tecnología.
La adopción de «personas digitales» está ganando tracción, y los asistentes virtuales ya son un caso de uso bien conocido.
Diversos especialistas aseguran que los inversores en América Latina deben centrarse en evaluar las empresas impulsadas por la Inteligencia Artificial en función de su capacidad para resolver problemas del mundo real y crear valor para los clientes.
Las startups no deben limitarse a utilizarla como una palabra de moda para atraer inversiones, sino que deben demostrar cómo su tecnología puede aplicarse en la práctica para resolver problemas del mundo real y crear valor para los clientes.
Para evitar el bombo publicitario, los inversores deben evaluar el impacto real en las operaciones empresariales y su capacidad para mejorar los resultados empresariales. También deben ser conscientes de los riesgos asociados a la inversión en empresas impulsadas por la Inteligencia Artificial, como la falta de transparencia en el proceso de toma de decisiones, las preocupaciones éticas y los posibles sesgos en los algoritmos.
Un medio para un fin
Andrés Dancausa, socio general de TheVentureCity, cree que la tecnología de Inteligencia Artificial no debe verse como la solución definitiva, sino como una herramienta para alcanzar un objetivo mayor. En su opinión, debe verse como un medio para un fin, más que como un fin en sí misma.
Además, según Dancausa, los inversores deberían evitar la tentación de centrarse excesivamente en la tecnología en sí, y concentrarse en cambio en el objetivo último de mejorar los resultados empresariales a través de su aplicación.
«Las empresas impulsadas por la Inteligencia Artificial deben evaluarse en función de su capacidad para resolver problemas del mundo real y crear valor para sus clientes», afirma Dancausa.
Si un inversor está considerando invertir en tecnología de Inteligencia Artificial, Dancausa sugiere que evite el bombo publicitario y se centre en casos de uso que creen valor. Es esencial concentrarse en soluciones que tengan un impacto real en los resultados empresariales y en la vida de las personas, en lugar de dejarse llevar por las últimas tendencias.
La oportunidad para las startups y los inversores
Las startups que buscan expandirse internacionalmente deberían considerar el ecosistema latinoamericano como una de sus primeras opciones. Aunque a menudo se considera que Estados Unidos es el destino preferido para las startups que buscan crecer, Latinoamérica ofrece numerosas ventajas que no pueden pasarse por alto.
Además, las condiciones sociales y económicas de América Latina crean un entorno en el que la innovación es esencial y la IA está prosperando, como hemos mencionado anteriormente.
Las startups se ven obligadas a desarrollar productos vitales y construidos para perdurar, en lugar de simplemente «agradables de tener». Como resultado, el mercado ofrece muchas oportunidades para que las startups innovadoras prosperen y tengan éxito.
El ecosistema latinoamericano de startups ha crecido significativamente en los últimos años, y se espera que 2023 sea un año en el que el tejido empresarial demuestre ser ideal para captar talento, capital y mercado.
Al mirar primero a Latinoamérica, las startups pueden obtener una ventaja competitiva en una región con un enorme potencial y hambre de innovación en nuevas y apasionantes tecnologías como la Inteligencia Artificial.
Sin embargo, es importante evitar las exageraciones y considerarla como un medio para alcanzar un fin, más que como un fin en sí misma.
Los inversores deben centrarse en casos de uso práctico que puedan tener un impacto significativo en la vida de las personas y las empresas, y evaluar las empresas impulsadas por la IA en función de su capacidad para resolver problemas del mundo real y crear valor para los clientes.
Con un enfoque basado en los datos, los inversores pueden identificar nuevas empresas prometedoras y ayudar a impulsar una innovación significativa en el campo de la Inteligencia Artificial.
Artículo escrito por Stefano De Marzo en Novobrief.
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