Son estos salarios los que forman la escasez de profesores, retrasando así la educación de las nuevas generaciones y poniendo en riesgo la inspiración de los jóvenes de seguir estudiando. ¿Quién podría tener motivación en un colegio o liceo cuando si de siete materias solo ven cuatro por falta de profesores? Esta es la realidad que viven los docentes, alumnos y padres en todo el país en este regreso a clases, que tan feliz no parece ser.