El régimen de Nicolás Maduro presentó este miércoles ante la asamblea nacional constituyente (ANC) su presupuesto para 2021, un proyecto con el que esperan burlar las sanciones económicas, también haciendo uso de la recién aprobada ley antibloqueo.
El vicepresidente de Planificación del régimen, Ricardo Menéndez, entregó el proyecto de presupuesto y de endeudamiento para 2021 a una comisión de la ANC, un cuerpo integrado solo por oficialistas y no reconocido por numerosos países.
«Este presupuesto de la nación tiene unos elementos vertebrales, dos elementos centrales: uno es el antibloqueo y el otro es la protección social de nuestro pueblo», dijo Menéndez a periodistas sin aclarar a cuánto asciende el total de las estimaciones gubernamentales de gasto para el año próximo.
«Bloqueo económico»
Indicó que para calcular esos montos el régimen tuvo en cuenta «una visión de la afectación de las cuentas de ingreso como consecuencia del bloqueo económico», en alusión a las sanciones internacionales que han afectado el sistema financiero venezolano en los últimos años.
«Se ha tenido una sanidad absoluta desde el punto de vista de la concepción de los ingresos que está teniendo Venezuela y los ingresos que esperamos tener precisamente para el año 2021. Estamos hablando de que nos quedamos con 1% del total de ingresos de la república», señaló.
El funcionario dijo que si al país entrasen menos recursos de lo previsto, el régimen será más eficiente «desde el punto de vista de la inversión» y en «el direccionamiento estratégico de esos recursos».
Entre las metas para 2021, adelantó, se encuentra la de «subir al máximo los niveles de protección» de los ciudadanos, tarea que esperan conseguir con un «incremento sustancial» en el sector salud, así como en ciencia, tecnología y educación universitaria, aunque no especificó montos para ningún sector.
«Ley antibloqueo»
Maduro informó recientemente que el país pasó de percibir 56.000 millones de dólares anualmente, aunque no especificó en qué año, a menos de 400 millones de dólares en 2019 debido exclusivamente, según él, a las sanciones económicas.
Para intentar burlar esas restricciones, el oficialista propuso la llamada ley antibloqueo ante la ANC, que la aprobó luego de una sola sesión en la que no hubo debate.
El instrumento legal, considerado ilegal por la Asamblea Nacional, liderada por Juan Guaidó, presidente interino de Venezuela, permite a Maduro concretar negocios y desaplicar normativas confidencialmente, bajo el argumento de que así podrá burlar las limitaciones internacionales que tiene su gestión para la compra y venta de productos.
Maduro insistió en la necesidad de aplicar esa ley al alegar que, debido a las sanciones, el país percibe menos de 1% del dinero que recibió en 2013 solo por venta de su ingente petróleo.
Presupuesto fuera del Parlamento
Por cuarto año consecutivo, la ANC recibe el presupuesto nacional pese a que la Constitución venezolana establece que es el Parlamento el que tiene la atribución de «discutir y aprobar el presupuesto nacional», un extremo que no se ha cumplido desde que la oposición se hizo con su control al obtener una clara mayoría en 2016.
Para 2020 la ANC aprobó un monto de 5.439 millones de dólares, menos de una décima parte del presupuesto de 2014, el primero que elaboró Maduro, que se ubicó por encima de los 80.000 millones de dólares.
Maduro indicó que la Asamblea Nacional fue declarada en desacato por el Tribunal Supremo de Justicia para omitir presentarle a los diputados sus obligaciones.
La Constitución de Venezuela obliga al Ejecutivo a presentar ante el Parlamento el presupuesto de la nación del año siguiente antes del 15 de octubre del año anterior.