José Fermín exige que a los tres funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana que están involucrados en el asesinato de su hijo Nicolás Fermín se les imponga la condena máxima de 30 años de prisión. Dijo, en una entrevista con Unión Radio, que está seguro de que los oficiales que lo interceptaron —quienes estaban vestidos de civil, no llevaban identificación visible y tenían chalecos antibalas y armas orgánicas— actuaron con la intención de robarle el carro al joven de 23 años de edad.
“Pena máxima para estos monstruos que hacen un curso de cuatro meses. Eso no me devolverá a mi hijo, pero sería un momento de saber que se hizo justicia en este país donde tantos jóvenes mueren de forma inadecuada”, expresó.
El hecho ocurrió alrededor de las 5:30 am del jueves 11 de mayo en Los Flores de Puente Hierro, en Caracas.
Tenía planes de irse de Venezuela
La víctima tenía el curso básico de piloto y ciertas horas de vuelo simulado aprobadas. Su padre, que reside en Estados Unidos, aseguró que no sabía que su hijo trabajaba como taxista en la empresa Ridery para conseguir más dinero y así ayudar a costear el pago de las últimas horas de vuelo que le faltaban para culminar el curso.
Nicolás también cumplía un proceso migratorio legal para salir de Venezuela.
“Ya estaba un proceso y tomó esta opción un poco más rápida; yo como padre no estaba al tanto de nada, jamás hubiese permitido que trabajara a esas horas de la noche, pero yo considero, y estoy con mi a bogado, que hubo una parte colateral hacia mi hijo porque él no tenía que estar esa noche ahí”, manifestó.
“Para nadie es un secreto que la carrera de piloto es una carrera bien costosa. Obviamente estábamos tratando de pagar las horas, estoy hablando de alrededor de 6.000 dólares el curso completo de las horas que faltaban. Quizá lo vio como una vía más rápida, no sé cómo lo vio él en ese momento porque yo no estaba al tanto de lo que estaba pasando, yo estaba enfocado en el proceso migratorio, pero no de eso”, añadió.
“El móvil era robar el carro”
José Fermín dijo estar convencido de que los policías nacionales tenían la intención de robar el carro y que estaban siguiendo a su hijo, pero no se percató de eso.
“Un muchacho joven, sin experiencia, sin experiencia en la calle. Es la primera vez que salía a trabajar, se encontró con un mundo tan complicado como Caracas y, obviamente, pienso que el móvil era robar el carro. Creo que lo venían siguiendo y él no se percató. Trabajó toda la noche, cosa que nunca tuvo que haber sucedido. Obviamente no con los mismos reflejos a las 5:00 de la mañana que a las 11:00 de la noche. Por más joven que sea, hay cansancio, hay estrés. Pero estamos convencidos de que el móvil era robar el carro”, expresó.
Por este delito ya están detenidos dos hombres, acusados de homicidio calificado por motivos fútiles, uso indebido de arma orgánica y omisión de socorro. Pero, recordó el padre del joven, hay un tercer funcionario que está fugado.
Aseguró que está haciendo todo el procedimiento legal para tratar de reunirse con el fiscal general Tarek William Saab y manifestó tener fe de que los fiscales encargados están cumpliendo con su trabajo. “Quiero pensar que es así, que podemos tener una Venezuela mejor, digna, que cada quien que le corresponda su trabajo lo haga. El trabajo de ellos es muy difícil, pero considero que ellos están haciendo su trabajo”.
El padre manifestó que Nicolás Fermín son todas las personas que de alguna forma viven momentos de impotencia en el país, donde el dinero no alcanza y existe una hiperinflación que, afirmó, está matando a los venezolanos. “Quiero justicia para estos monstruos que lamentablemente cegaron la vida de mi hijo, un joven con mucho futuro, que estaba buscando futuro en el exterior”.