VENEZUELA

«No es un país sino un campo de concentración»: venezolanos rechazan la decisión de Maduro de no permitir el ingreso de las vacunas AstraZeneca

por El Nacional El Nacional

La decisión del régimen de Nicolás Maduro de no permitir el arribo de 2,4 millones de vacunas de AstraZeneca a Venezuela, aun cuando el país atraviesa un repunte de casos de coronavirus, provocó que los venezolanos expresaran su rechazo en las redes sociales.

Maduro dijo el miércoles, durante una transmisión por Venezolana de Televisión, que al país no entrará ninguna vacuna que no haya recibido la autorización previamente.

La Organización Panamericana de la Salud había anunciado que las primeras vacunas previstas para el país son esas dosis desarrolladas por un equipo de la Universidad de Oxford y la empresa farmacéutica.

Varios países de Europa recientemente suspendieron el suministro por el temor de que su uso estuviera relacionado con los casos de trombosis que presentaron algunos pacientes. Pero los gobiernos, luego del avance de los estudios, reiniciaron la aplicación.

Delcy Rodríguez informó el mismo miércoles que escogerán a través del Covax una vacuna diferente para aplicarla en Venezuela contra el covid-19. Alegó que han tenido acceso a informes científicos que señalan problemas con la vacuna en varios países.

«Un campo de concentración»

Usuarios de Twitter manifestaron su preocupación, además del aumento de casos de covid-19 y de muertes por complicaciones asociadas por las carentes condiciones del sistema hospitalario de Venezuela.

«Una vez más queda claro que esto no es un país sino un campo de concentración«, afirmó en el actor y director de teatro Héctor Manrique.

La escritora Jacqueline Goldberg dijo que el no permitir que los venezolanos se vacunen debe entenderse como un genocidio.

Ciudadanos también posicionaron en la red social #DejenEntrarLaVacuna. En Venezuela se ha denunciado que ni siquiera la totalidad del personal de salud ni de los docentes han recibido la dosis de la rusa Sputnik V ni la china Sinopharm, muy lejos de alcanzar la meta de inmunizar a 70% de la población este año.

Maduro, su esposa Cilia Flores y varios políticos ya se inyectaron.

«En Venezuela la vacunación contra el covid-19 ha sido política y sin criterios serios. El personal de salud no se ha vacunado. Los más vulnerables no se han vacunado. La OPS aprueba vacunas para Venezuela que son necesarias y Maduro las prohíbe», dijo la organización no gubernamental Provea.

Carlos Vecchio, representante diplomático de Juan Guaidó en Estados Unidos, acusó al régimen de intentar bloquear las gestiones que se han avanzado en colaboración con la oposición para acceder al mecanismo Covax.

«Venezuela, el país donde se debe suplicar a quienes gobiernan que permitan la entrada de vacunas para la mayoría; no solo para un grupo de gobernadores, diputados, ministros, etcétera», manifestó el periodista Eugenio Martínez.

La escritora Ibéyise Pacheco expresó: «Esta modalidad criminal de condenar a una población a sufrir una pandemia impidiendo que sea inmunizada a pesar de existir la vacuna merece la máxima condena».

«Las muertes no serán por el virus sino por quienes impiden que lleguen las vacunas«; «Los ciudadanos exigimos nuestro derecho a la salud»; «La ineptitud, la mediocridad y la apetencia desmedida, enfermiza y psicótica de poder nos quiere fuera, presos o muertos»; «Es muy fácil tomar esa decisión cuando ya ellos se vacunaron. Esto va más allá de la maldad», agregaron otros usuarios.