Insight Crime determinó que Nicolás Maduro no ha podido sustentar su versión de que existe un plan del «fantasma» de los Tancol, un término inventado por el chavismo para identificar a terroristas y narcotraficantes colombianos en contra de su gobierno.
El centro de pensamiento indicó que 41% de los operativos realizados entre 2021 y hasta febrero de este año se dirigieron hacia guerrilleros. Sobre todo grupos de disidencias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia que participan en actividades de narcotráfico y considerados además como terroristas por Estados Unidos.
Hacia finales de 2021, las fuerzas de seguridad habían informado de un total de 12 acciones desplegadas contra los Tancol. Esto según los monitoreos de fuentes oficiales y notas de medios hechos por InSight Crime.
En 2022, las operaciones se multiplicaron y para finales de ese año se habían registrado 126 acciones de las fuerzas de seguridad contra los Tancol. Eso es un promedio de 11 por mes. Ya para finales de febrero de 2023 se registró un total de 149 acciones contra los supuestos Tancol, agregó.
Señaló que no hay información que confirme que los disidentes de las FARC hayan cometido actos de terrorismo político en Venezuela. Incluso, añadió, los irregulares que han sufrido ataques en los operativos de seguridad tenían presuntas conexiones «delincuenciales y políticos» con elementos del Estado venezolano.
Detenidos por debajo del grado de amenaza
En la investigación de Insight Crime se puntualizó que es probable que otro 40% de las acciones se dirigieron hacia redes de narcotráfico en las que en algunos casos están involucrados delincuentes colombianos.
«Los casos analizados no involucraban a grupos armados con motivaciones políticas. En su lugar, se trató de redes clandestinas -o reclutas rasos de las mismas- dedicadas al trasiego de drogas o que prestaban servicios logísticos a traficantes, como el contrabando de combustible para avionetas», expuso.
En varios casos, añadió, los detenidos estaban incluso por debajo del grado de amenaza a la seguridad y fueron detenidos por narcomenudeo.
Dijo que muchos de los operativos restantes se dirigieron contra grupos sin conexión conocida con el narcotráfico o el terrorismo, y sin vínculo aparente con Colombia.
El centro de pensamiento afirmó que las autoridades venezolanas clasificaron como Tancol a miembros de la banda El Ciego, el Tren de Guayana, el Sindicato de El Perú y la Organización R, aun cuando se trataba de grupos venezolanos dedicados a lucrarse del contrabando de oro.
«Ninguna de las acciones estudiadas mostró evidencia de ataques terroristas, actividad política o conspiración de cualquier tipo contra el Estado venezolano ni mostraron tener conexiones con el gobierno colombiano o con las élites económicas de ese país», subrayó.
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