Los exministros chavistas Rafael Ramírez y Andrés Izarra respondieron a los recientes señalamientos de Nicolás Maduro, quien señaló que algunos exfuncionarios estarían liderando una nueva conspiración en su contra.
«Denuncié en estos días que había unos pequeños grupos, financiados por los gringos, que están pretendiendo dividir a nuestro poderoso movimiento de unión cívico-militar; están tratando de dividirlo disfrazados de chavistas, alguna gente que algún día fue ministra o ministro y terminaron vendiéndole el alma al diablo, ahora pretenden venir a confundir al pueblo», dijo Maduro en Los Próceres, durante un acto del oficialismo para conmemorar los 31 años del intento de golpe de Estado de Hugo Chávez.
Ramírez, exministro de Petróleo, respondió a las acusaciones en un artículo publicado en su página web. «Maduro es el único que ha vendido su alma al diablo, ha entregado la patria socialista, la economía y el petróleo. Este es un gobierno neoliberal y antichavista», manifestó.
Con respecto a los sucesos del 4 de febrero de 1992, Ramírez señaló que esa situación ocurrió como consecuencia del contexto económico, político y social de entonces, que era menos complejo que la realidad actual.
«Es decir, para ser más claro, por mucho menos de lo que sucede actualmente, el comandante Chávez insurgió en contra del gobierno de Carlos Andrés Pérez en 1992», añadió
Izarra, quién estuvo al frente del ministerio de Comunicación e información, alertó sobre una nueva ola represiva contra la crítica a su política fascista y neo-liberal.
«El madurismo no tiene otra manera de enfrentar la batalla de ideas. No tienen argumentos para defender su traición», escribió en Twitter.