«Los venezolanos no podemos prescindir de la opción del diálogo franco y abierto, entre todos los sectores, no solo políticos, en función de la defensa de los grandes intereses de la nación», dijo Eduardo Fernández, presidente del Instituto de Formación de líderes y políticas pública Arístides Calvani, en la Cámara de Comercio de La Guaira, con motivo de la presentación de su libro Ideas para el cambio.
Y añadió: «Hemos tenido muchos períodos de grandes confrontaciones violentas, fratricidas y políticas que han dejado de lado los anhelos nacionales, lo que, en definitiva, no ha dejado nada de provecho a los venezolanos, sino al contrario, atraso y pobreza».
Destacó que en tiempos recientes los acuerdos y la concertación con venezolanos como Rómulo Betancourt, Rafael Caldera y Jóvito Villalba permitieron avances económicos y sociales, como, por ejemplo las grandes obras de electrificación nacional, «a un punto tal que pudimos exportar energía, aeropuertos, sistema de salud, universidades y más recientemente el sistema subterráneo o Metro».
«Trabajar por la unión de los venezolanos»
“Esas obras se culminaron porque con cada nuevo gobierno no hubo revanchismo ni paralización de los proyectos, sino plena continuidad”, enfatizó Fernández.
Dijo que Venezuela necesita salir de la crisis política, económica y social, sin ocultar que subsiste una gran crisis moral que ha derrumbado los principios y valores plasmados en la Constitución.
“Para lograr esos objetivos hace falta que el nuevo gobierno tenga conciencia de que su principal obligación es trabajar por la unión de los venezolanos, por la concordia y reconciliación nacional, por la fijación de metas concretas que nos convoquen solidariamente a trabajar unidos en la misma dirección de progreso y bienestar para todos”, expresó.