OPINIÓN

Venezuela, clave y reflejo continental 

por Alicia Freilich Alicia Freilich

 

Por su inmensa y variada riqueza mineral, posición geográfica central de las tres Américas, límites marítimo, fluvial, montañoso y selvático extensos con diversidad climática productiva, históricos ejemplos: el auténtico independentista bolivariano siglo XIX, cuarentona democracia del XX, primaria víctima hemisférica del castrocomunismo y en lo que va del XXI recuperar el capitalismo social-demócrata liberal en lucha constitucional contra el militarismo represivo a su vez grave crisis institucional entre su cúpula criminal y un sector del generalato controlados por Vladimir Padrino López. Una oposición militar silenciada, castigada masa castrense. No les importa  la situación económica de los cuadros medios ni del soldado raso. Más allá de esas pugnas caudillistas, la conducta reactiva del sector disidente interno, ya mayoritario será determinante en el destino político del país y la región. Con serias implicaciones delictivas para el actual gobierno español. 

Venezuela  hoy es el claro espejo, cóncavo y convexo, local y foráneo, de dos arquetipos políticos diametralmente distintos. Y por eso, cabe preguntar en directo lo que sigue. 

A la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, cuyo apellido yidish germánico significa «bello árbol», pero no incluye matas de coca al servicio del crimen organizado: ¿Por qué se solidariza de inmediato, públicamente con todas las acciones del presidente colombiano, pero calla sobre el caso venezolano alegando: “México no es injerencista y respeta las decisiones de cada país … Mi gobierno mantendrá una postura imparcial sobre la crisis poselectoral de Venezuela”. 

Al citado Gustavo Petro, quien califica de genocida al democrático Israel por su guerra defensiva contra cinco  grupos terroristas islámicos radicales cuya meta fundacional religiosa consiste en eliminar al Estado Israel y de paso fomentar el antijudaísmo a nivel mundial bajo el nombre de “antisionismo”: cuando un sector de la guerrilla ELN rechaza su fracasado plan pacifista, ¿por qué les avisa que serán eliminados  del todo con drones? ¿Sabe la diferencia entre un estatal planificado genocidio al estilo Stalin-Hitler y batallas para sobrevivir a los terroristas que usan civiles en escuelas, hospitales, mezquitas, como escudos para preservar su armamento y dominio sobre Gaza y Líbano?

Al presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, experto conocedor de cerca y muy a fondo de los mecanismos corruptos que usó la empresa Odebrecht para sobornar a dirigencias continentales incluyendo la suya, sabedor de los sucios negocios gansteriles de Pdvsa: ¿Por qué no denuncia el gigantesco fraude electoralista del régimen militarizado chavomadurista y se limita a repetir frases hechas que evitan, eluden, esconden la verdad mediante sus ambiguas consignas llamadas “neutrales”. 

Los tres desconocen a Edmundo González Urrutia como legítimo presidente de Venezuela desde el 28J. De facto reeligen al régimen que por vía electoral perdió el poder. ¿Es que no captan que mañana puede sucederles algo  parecido, quizás lo mismo, pero no tendrán derecho legal ni moral para reclamar justicia? ¿Quieren imponer ese modelo a toda Latinoamérica?

Cuando Nicolás Maduro se afilia a dos imperios, el ruso de Putin y el iraní de los ayatolás, obedece mandatos de su Padrino. ¿Están ambos dispuestos a integrarse a los ejércitos terroristas de Putin, Hamás y Hezbolá? ¿O seguirán en pánico a la sombra temerosos de traiciones? ¿Finalmente usarán sus ensangrentados uniformes militares para ayudar en persona a los invasores de Ucrania, Israel y otras naciones que les serán impuestas con base en su declarado amor por esos héroes patrióticos? Idéntica pregunta para su propio ministro enemigo Diosdado Cabello, listo de palabra para batallar en carne y hueso, comandando en primera fila por la patria bolivariana, con su oratoria busca desmentir a quienes lo acusan de huir cuando la famosa renuncia de Chávez Frías. Tres ejemplares de la sociopatía uniformada en acción.

¿Pueden ambos partidos tradicionales de Estados Unidos de una vez por todas acabar su fija contradicción poniéndole alto precio a las cabezas de ladrones usurpadores y al mismo tiempo comprándoles petróleo para colaborar con su permanencia en Cubazuela?

¿Podrá el moderno Israel demócrata liberarse de tantos enemigos terroristas islámicos y al unísono de Netanyahu  con su gabinete de partidos ultrarreligiosos que quieren liquidar al poder judicial de su Corte Suprema?

¿Quiénes se atreverán a modificar la estructura inoperante de la desunida ONU dedicada a redactar informes y  comunicados, para que en su nueva era no se admitan tiranos, violadores sistemáticos de los derechos humanos ni cobardes que omiten las atrocidades continuas del terrorismo a nivel global?

Afirman comunicadores analistas de lo bueno y malo aportados por la inteligencia artificial, más otros experimentos cibernéticos, que en esta posverdad avanzada se perdió la inteligencia natural, pues ahora se equivalen veracidad y mentira, certeza y duda, hechos y fantasías, orden y caos, realidad y ficción, decencia y delincuencia, legalidad y subversión. 

Venezuela, foco hemisférico con puertas de espejo desde hace un cuarto de siglo, es víctima de ese descrito síndrome que prohíbe la libertad y siembra esclavitud. Lo sufre, acusa, denuncia, reclama y continúa resistiendo casi sola frente a voluntarios ciegos, sordos y mudos. Automáticamente cómplices de la crueldad revolucionaria. 

alifrei@hotmail.com