El próximo 28 de julio estaremos nuevamente frente a la historia. Vistos los episodios comprobados en los cuales una evidente mayoría venezolana, eso que se conoce como “la soberanía”, ha sido burlada por el castro chavo madurismo mediante el engaño y la represión, nos toca nuevamente un momento crucial de nuestra existencia como ciudadanos. Pero sobre todo como pueblo organizado: o damos el todo por el todo en estas horas por salir de la pesadilla, o de lo contrario sería permanecer rehenes en esta suerte de “muerte suspendida”, esclavitud o secuestro al que se nos han estado sometiendo como nación.
Desde mi voz, expresión conmovida por el sufrimiento de hermanas y hermanos de lucha que siguen prisioneros de la tiranía, aunque expresada desde mi libertad relativa en el exilio, doy gracias a El Nacional, pidiéndoles ser interpretado como una voz de alerta. Que ni siembre pesimismo pero que tampoco nos permita que nos sumerjamos en un espejismo idílico de pensar que, por ser la evidente mayoría que somos, ahora bajo el corajudo e inteligente liderazgo de María Corina Machado el régimen aceptará, así no más, su salida. Tampoco estamos ante una inminente caída de la dictadura por otros medios distintos. Ella y su valeroso equipo, con gran pasión venezolanista ha logrado revivir en todos la esperanza en la recuperación de la libertad y la democracia. ¡Pero esto debe quedar claro que es será mucho más que sólo votar! ¡Tenemos que obligarlos a salir!
La repetición del fraude electoral que acostumbra a ejecutar la usurpación pretende ser reeditado aplicándolo desde un narcorrégimen que aún algunos parecieran querer percibir en él sólo rostro de Nicolás Maduro. Es mucho más que la suma de adláteres como Diosdado y Jorge Rodríguez. Es la realidad de un conjunto de criminales que cedieron nuestra soberanía al casticismo e hicieron de ello su modus vivendi. Luego lo fueron complementando con demenciales “alianzas” en otras entregas contranatura.
Lo que bien pudiera haber sido desarrollar beneficiosas relaciones internacionales en una nuevo mundo multipolar, no sólo se negaron a reconocer y apreciar el magnífico obsequio del mundo occidental al que pertenecemos, sino que deforman su historia. Desde la era de la ilustración que se nos legó como una brújula que nos señala el norte de lucha por los valores y principios de defensa de los derechos humanos hasta los momentos presentes de avance de las ciencias, las tecnologías, las artes y el papel del avance determinante del papel de la mujer en el mundo.
Desde nuestra cultura judeocristiana, y la belleza de un país que superó los odios de las posguerra anticolonial, sin complejos religiosos ni raciales profundos, pudimos dar difíciles y hasta tardíos pasos al siglo XX que, sin embargo, nos permitieron abrirnos hacia una transición triunfadora, con la partida del general venezolano Marcos Pérez Jiménez.
Recibiendo decenas de miles de mujeres y hombres que adoptaron costumbres y tradiciones venezolanas desde otras latitudes que junto con las nuestras crearon una sociedad más productiva y con mejor ciudadanía.
Con la llegada a la seudorrevolución bolivariana se violaron todos los preceptos de nuestra nacionalidad. Dando pasaportes venezolanos al terrorismo islámico, por parte del hoy enjuiciado Tareck el Aissami. Éste ascendía a cargos de mayor poder desde la dirección de la Oficina de Identificación y Extranjería, Onidex, al de ministro del Interior, y hasta vicepresidente de la República. Siguieron con refuerzos a la no menos degenerada alianza con la dictadura de Putin, fortaleciendo el eje Moscú-La Habana, en la figura del traidor y eternizado ministro de la Defensa, Vladimir Padrino López.
Al día de hoy, combatiendo hacia adentro de su degeneración, y otro tanto hacia la llamada oposición por ellos creada con alacranes, el régimen ha mostrado su clara intención de combatir hasta el exterminio a todo cuanto amenace su permanencia en el poder. María Corina también les ha dejado claro que nosotros ¡con ella, y nuestro pueblo, iremos hasta el final!
¡Aquí y ahora es el momento de avanzar hermanos de lucha! Venezolanos de bien, de todos los sectores, civiles y militares, junto a Maria Corina y nuestro pueblo valeroso ¡tenemos que obligarlos a salir!
catedrainternacional [email protected]/ @gonzalezdelcas