OPINIÓN

Cierre de las operaciones de Directv Latin America en Venezuela

por Andrea Rondón García Andrea Rondón García

El 19 de mayo de 2020, a más de 60 días de decretado el «estado de alarma» para atender la emergencia sanitaria generada por el covid-19 en el territorio nacional, los venezolanos recibimos la triste noticia del cese de operaciones de Directv en Venezuela.

En su comunicado la compañía expresa lo siguiente: «Hoy, AT&T Inc. anunció el cierre de las operaciones de Directv Latin America en Venezuela, con efecto inmediato. Las sanciones del gobierno de Estados Unidos en Venezuela han prohibido la transmisión de los canales de Globovisión y Pdvsa, ambos requeridos bajo la licencia para ofrecer servicio de TV paga en Venezuela».

Aunque los venezolanos recibamos este tipo de noticias frecuentemente, no podemos dejar pasar lo que significa cada uno de estos casos. Directv no es un tema menor porque significa obstáculos a la inversión extranjera; porque en un régimen hiperlegislado y regulado es inevitable escoger entre cerrar operaciones o violar la “ley”; porque considerando el contexto actual otras empresas con inversión norteamericana están cerca de sufrir este mismo destino.

El cese de operaciones ocurre en medio de un «estado de larma» que a nivel mundial nos coloca frente a una grave crisis económica, pero en Venezuela es una etapa más de este proceso de destrucción que lleva 20 años y significa también el riesgo de perderse 600 empleados y 2 millones de hogares sin TV.

También es un día de luto para la comunicación en Venezuela, como ha referido el crítico de cine y documentalista Sergio Monsalve, porque Directv era una de las últimas ventanas  de desahogo y esparcimiento en un país en el que los pocos canales de señal abierta están parcializados a favor de este régimen.

Directv no es el nombre de otra empresa que se suma a una larga lista, sino que es un caso que tiene un significado específico dentro de esta política de destrucción de la propiedad. Sin ser exhaustiva, y por mencionar los casos que me ha tocado analizar desde el Observatorio de Propiedad de Cedice Libertad, podemos ver un método:

Hipermercados Éxitos sería de las primeras compañías atacadas selectivamente por el gobierno en el mes de diciembre y a lo largo de varios años. Los ataques contra estas empresas, en su mayoría del ramo de alimentos y de productos de primera necesidad, estarían acompañados de un discurso populista para garantizar las navidades del venezolano y que obligaría a bajar drásticamente el precio de los productos. En este grupo, y de una forma más notoria, estarían además Daka, Kreisel, EPK...

Clorox sería de los primeros ejemplos de compañías asfixiadas por las condiciones económicas que ante el anuncio de cese de sus operaciones fue ocupada por el gobierno con fundamento en la Ley Orgánica del Trabajo, del Trabajador y de la Trabajadora. Le seguirían otras empresas en condiciones similares, pero con fundamento en otras leyes igualmente liberticidas. En este grupo también estarían Zuly Milk, Kimberly Clark, Alimentos Kellogg’s…

RCTV no podría seguir operando a partir de mayo de 2007 debido a la no renovación de su concesión. Esta televisora sería emblemática en muchos sentidos, porque tenía una línea editorial crítica en contra del gobierno; porque sería hasta ese momento el medio de comunicación más conocido al que se le impidió seguir operando en el país por razones políticas. A partir de RCTV siguieron cayendo los medios de comunicación críticos al gobierno. Hoy, mayo de 2020, dejó de operar Directv en Venezuela y recientemente fue intervenida por el gobierno. Pero a este luto dentro de las comunicaciones en Venezuela, se agregan más elementos que no podemos obviar.

Directv es otro hito en esta política sistemática de destrucción de la propiedad porque ocurre en un contexto de completa incertidumbre para el país (uno de los mayores de estas dos últimas décadas); con todas las condiciones mínimas para vivir con dignidad gravemente afectadas; con una compañía que representaba cerca del 40% de suscripciones en todo el país y que evidencia las duras escogencias del capital extranjero en Venezuela: de un lado violar la ley del país origen de tu capital y del otro, violar la «ley» de este régimen o cerrar operaciones.

Directv no solo representa la pérdida de uno de los servicios de cable más baratos, esto sería una lectura demasiado simple del problema… Directv no es una empresa más víctima de esta política de destrucción de la propiedad… Directv es un punto de inflexión…