Dos migrantes venezolanos aprovechan la coyuntura política de Ecuador para ganarse la vida. Ambos venden tortas y café a policías y personas que están en los alrededores del Palacio de Carondelet en Quito.
En declaraciones ofrecida a CNN, el joven aseguró que vive a pocas cuadras del lugar desde hace dos meses y que ofrecen sus productos a funcionarios policiales y trabajadores de la prensa.
Al ser consultados sobre la crisis política y social que actualmente agobia a Ecuador, los venezolanos evitaron pronunciarse al respecto.
“Con tantos problemas que vivimos en nuestro país, uno no sabe qué opinar acá”, dijo el joven. “Uno tiene que estar neutral. ¿Cómo uno puede estar opinando?», expresó su compañera.