Donal Trump, presidente de Estados Unidos declaró el estado de emergencia en California y pidió que el gobierno federal preste asistencia adicional debido a los incendios que desde principios de diciembre ocasionan graves daños a la ciudad.
200.000 personas han sido evacuadas por las autoridades. El Departamento de Seguridad Nacional y la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) fueron autorizados por Trump para coordinar todos los esfuerzos en las tareas de socorro.
En un comunicado emitido por la Casa Blanca se explicó que el objetivo de esta medida es aliviar el sufrimiento de la población local y prestar asistencia a las autoridades estatales, locales y tribales.
El fuego hasta la fecha ha consumido miles de hectáreas, se extiende rápidamente por las costas del país debido a los vientos de Santa Ana.
En la zona de San Diego, el fuego ha quemado más de 1.000 hectárea, destruido muchas estructuras y dejó a dos personas heridas.