La propuesta del presidente colombiano, Gustavo Petro, de convocar una asamblea nacional constituyente si el Congreso no aprueba sus reformas, fue rechazada tajantemente este viernes por diferente sectores políticos que consideran que pone en peligro la democracia.
«Si esta posibilidad de un Gobierno electo popularmente, en medio de este estado y bajo la Constitución de Colombia, no puede aplicar la Constitución porque lo rodean para no aplicarla y lo impiden, entonces Colombia tiene que ir a una asamblea nacional constituyente», dijo Petro en un acto en Cali (suroeste).
La propuesta de Petro de reformar la Constitución recibió de inmediato una avalancha de críticas. Hay quienes consideran allanará el camino para que el mandatario busque la reelección en 2026, lo que no es permitido por la Carta Magna. Afirman que, además, aumentará la polarización en el país.
«En Cali, esta tarde, el presidente Petro estuvo en su salsa: por fin anunció lo que siempre se sospechaba, su deseo de convocar una Asamblea Constituyente». Dijo en su cuenta de X el excandidato presidencial Sergio Fajardo.
Según Fajardo, el deseo de Petro de cambiar la Constitución es «la confrontación abierta como cortina de humo para justificar la incapacidad de su Gobierno para adelantar las reformas. Más polarización, más agresiones, más caos. Fatal. Era previsible, y lo que falta…».
«¡NO PRESIDENTE! Las instituciones no existen para apoyar lo que quiera el gobernante de turno sino para garantizar el sano ejercicio de la democracia y del respeto a la independencia de los poderes públicos», expresó por su parte el exministro de Hacienda José Manuel Restrepo.
Para Restrepo, «Colombia no necesita ‘asambleas constituyentes’ porque la democracia en Colombia es suficientemente madura como está concebida y ha sabido y sabrá interpretar y reflejar lo que necesita el país».
Democracia en peligro
El alcalde de Medellín, Federico ‘Fico’ Gutiérrez, que también fue candidato presidencial en 2022, año en que fue elegido Petro, aseguró que el mandatario «ha abierto esta tarde una compuerta peligrosa para la democracia colombiana» y ha «amenazado con ir por una asamblea constituyente si el actual Congreso no le aprueba las reformas que destruyen el país».
De las reformas presentadas por Petro al Congreso, en el segundo semestre de 2022 logró la aprobación de la tributaria. Sin embargo, las de la salud, la laboral y la del sistema de pensiones están empantanadas en el Legislativo. Allí el apoyo al mandatario es cada vez menor.
«No luce necesaria una nueva asamblea nacional constituyente en estos momentos», expresó Antonio Navarro Wolff. Este fue compañero de Petro en la guerrilla del M-19. Luego, en su regreso a la vida civil, entre otros cargos, fue uno de los presidentes de la Asamblea Nacional Constituyente que redactó la actual Carta Magna, que data de 1991.
«No puede haber una peor idea»
En opinión del representante a la Cámara Juan Carlos Lozada, del Partido Liberal, «no puede haber una peor idea que una asamblea nacional constituyente». Afirmó que «la Constitución del 91 tiene todas las herramientas para construir un país en paz y con justicia social».
«Si el problema es la dificultad para aplicarla, la solución no es una nueva Constitución. La solución tiene que venir de gobernar bien y construir un proyecto político de largo aliento», dijo en X Lozada. Concluyó dirigiéndose a Petro: «Lamentablemente es usted quien está dilapidando esa posibilidad».
Para el senador Ariel Ávila, de la Alianza Verde que apoyó a Petro en 2022, «los consensos se logran en el Congreso de la República». «No abriendo una caja de pandora como lo es una asamblea nacional constituyente», agregó.
«La Constitución de 1991 no solo tiene todas las herramientas para una transformación social sino que fue concertada por muchos grupos, incluido el M-19. El 7 de agosto de 2022 yo juré defender esta Constitución y eso haré hoy y siempre». Así manifestó, por su parte, la liberal Cecilia lópez, quien fue la primer ministra de Agricultura de Petro.
El analista político Ramiro Bejarano advirtió: «Una constituyente para que Petro imponga sus reformas en contra de la mayoría de las fuerzas sociales y políticas es un atentado a la democracia». Consideró que esa propuesta «es el camino tortuoso de una reelección tramposa».