MUNDO

Piedad Córdoba: la razón por la que siempre usaba turbantes

por Avatar GDA | El Tiempo | Colombia

La política colombiana lamenta este sábado el fallecimiento de la hasta hoy senadora del Pacto Histórico Piedad Córdoba, de 68 años, en la ciudad de Medellín. La también abogada se distinguía, entre otras cosas, por siempre llevar un turbante en su cabeza, ¿a qué se debe el gusto por esta prenda?

Córdoba, sobre las 12:50 de la tarde de este 20 de enero, fue hallada inconsciente por su equipo de seguridad mientras se encontraba en su apartamento del edificio Chenoa (Carrera 63b con calle 37), en la capital antioqueña.

Luego, fue trasladada a la Clínica Los Conquistadores, en el sector que lleva el mismo nombre, a donde llegó sin signos vitales, por lo que los médicos intentaron reanimarla por alrededor de 20 minutos. Tras no obtener respuesta, se declaró el deceso.

«Se trató de un paro cardíaco no presenciado y tras no resultar las maniobras de reanimación cardiopulmonar, estas se suspenden y se declara a la paciente fallecida», indicó el doctor Martín Mora Rendón, director médico de la Clínica Conquistadores.

Tras establecerse su muerte, la Policía realizó el levantamiento del cuerpo en el centro médico. Luego, funcionarios de la Sijin fueron hasta el apartamento para hacer una inspección en el lugar donde fue hallada desmayada y, posteriormente, el cadáver fue llevado hasta Medicina Legal.

La historia de sus turbantes

A donde iba, Córdoba siempre portaba un turbante de colores en su cabeza, por lo que desde joven se volvió una característica indispensable para reconocerla en el entorno político.

Incluso, en conversación con la revista Semana hace unos años afirmó que podía hacer turbantes hasta con una sábana, y pidió que no le regalaran más porque ya “no tenía dónde meterlos”.

El uso constante de esta prenda, según comentó en una entrevista con la revista Fucsia hace un tiempo, se debe al orgullo que sentía por sus raíces afrodescendientes, pues su padre era chocoano.

 

“Es un grito lo que yo represento. Mis trenzas, mis turbantes, mi ropa es una forma de expresar lo que siento por ser afrodescendiente, es una forma de desafiar a aquellos que me caricaturizan como negra, como si eso fuera un delito o un pecado”, manifestó en aquel momento.

Debido a que no se mostraba constantemente sin turbantes, se creó la falsa teoría de que tenía un problema capilar. Sin embargo, esta información fue desmentida cuando se revelaron unas fotos sin la famosa prenda, en las que se ve su cabello corto.

El mundo político la despide

Tras la noticia de su deceso, el presidente Gustavo Petro lamentó el fallecimiento y escribió: «Piedad Córdoba fue una mujer golpeada por un época y una sociedad. Luchó toda su vida madura por una sociedad más democrática. Su cuerpo y su mente no resistieron la presión de una sociedad anacrónica, que aplaudía los ajustamientos de jóvenes, que odiaba el diálogo y la paz, que odiaba a los negros, a los indígenas y a los pobres, que la trataba como una criminal».

De igual forma, la vicepresidente Francia Márquez escribió en sus redes sociales que lamenta «profundamente» la muerte de Córdoba. «Una mujer que abrió las puertas de la política colombiana a las mujeres afrodescendientes y que luchó de manera incansable por la paz y la justicia social en nuestro país», agregó.

«Como Alcalde de Medellín he sido informado de la muerte de la Senadora Piedad Córdoba. Al parecer llegó sin signos vitales a la Clínica Conquistadores de Medellín.

Solidaridad con sus familiares», indicó por su parte Federico Gutiérrez.

Rodrigo Londoño, excomandante de las extintas Farc y presidente del partido Comunes, afirmó: «Piedad Córdoba fue una auténtica demócrata, una liberal de convicciones profundas, incansable defensora de los DDHH y una imprescindible de la solución política al largo conflicto armado. Negra rebelde e incansable luchadora por la paz de Colombia. Que la tierra le sea leve».

Nicolás Maduro, presidente de Venezuela, dedicó un sentido mensaje, en el que resaltó que, a pesar de enfrentar «grandes amenazas», Córdoba «prevaleció su moral y esa fuerza para salir adelante ante cualquier dificultad. Era inmenso el amor por su Colombia querida».