Brasil ya vacunó contra el covid-19 a 37% de los 410.000 indígenas adultos que viven en aldeas, principalmente en la Amazonía, considerados prioritarios en la campaña de inmunización por ser uno de los grupos más vulnerables a la pandemia, informó este jueves el Ministerio de Salud.
El gigante latinoamericano, uno de los países más afectados por la pandemia en el mundo y que ya vacunó a 2,8 millones de personas contra el coronavirus, reservó 907.200 dosis de las primeras vacunas adquiridas para inmunizar a 410.000 indígenas mayores de 18 años residentes en aldeas (2 dosis para cada uno).
Este grupo representa a 54,3% de los cerca de 755.000 indígenas brasileños residentes en las aldeas que son atendidas por los médicos de los 34 Distritos Sanitarios Especiales Indígenas (DSEI) del país, según el Ministerio de Salud.
Además de los indígenas, tales vacunas también están reservadas para los cerca de 20.000 profesionales de salud responsables por la atención médica en las reservas.
De acuerdo con la cartera, la campaña de inmunización de los indígenas prevé la movilización de 14.000 médicos y enfermeros con el apoyo del Ministerio de Defensa para llegar hasta cerca de 6.000 aldeas, varias en regiones remotas y aisladas de la Amazonía.
El secretario especial de Salud Indígena, Robson Santos da Silva, explicó que el porcentaje de vacunados puede ser mayor debido a que, como en muchas aldeas no hay señal de celular ni acceso a Internet, las cifras de inmunizados no han sido totalmente actualizadas.
Agregó que el acceso a las aldeas exige una gran logística de transporte aéreo, fluvial y terrestre debido al difícil acceso a muchas de esas áreas.
«En algunas áreas del estado de Acre, por ejemplo, los equipos de salud demoran hasta nueve días para llegar hasta la última aldea. Eso sin contar que en muchas regiones esta época del año es lluviosa. Pero no hay atraso en la vacunación, tan solo en la actualización de los datos», afirmó Da Silva, citado en un comunicado del ministerio.
El funcionario agregó que entre los indígenas ya inmunizados, hasta ahora no se ha registrado reacción negativa a la vacuna.
Vacunación para indígenas urbanos
Pese a la rápida e intensa movilización del gobierno para vacunar a los indígenas en aldeas y reservas, las entidades indígenas y asociaciones sanitarias alegan que la campaña de inmunización también tiene que incluir a los indígenas que viven en áreas urbanas y que son igual de vulnerables.
Según el ministerio, la vacunación de estos en áreas urbanas es responsabilidad de las secretarías municipales y regionales de Salud.
De acuerdo con el Censo de 2010, Brasil cuenta con cerca de 900.000 indígenas, 0,47% del total de la población, de 305 etnias. Hace 10 años el número de indígenas viviendo en áreas urbanas ascendía a 324.834.
Esta diferencia explica las variaciones en las estadísticas sobre el impacto del covid-19 en estas poblaciones en Brasil.
Según el Ministerio de Salud, que tan solo tiene en cuenta los que viven en las aldeas, hasta el pasado miércoles 41.855 indígenas habían contraído coronavirus, 549 de los cuales murieron.
La organización no gubernamental Articulación de los Pueblos Indígenas (Apib), que incluye las poblaciones que viven en áreas urbanas en sus estadísticas, contabilizó hasta el miércoles 47.752 contagios y 948 muertes por covid-19 en un total de 161 etnias afectadas.
Un estudio de la Universidad de Pelotas mostró que la incidencia del coronavirus entre los indígenas urbanos es cinco veces mayor que entre los no indígenas, lo que demuestra que son tan vulnerables como los que viven en las aldeas.
Tal vulnerabilidad llevó a la Asociación Brasileña de Salud Colectiva (Abrasco) y a la Asociación Brasileña de Antropología (ABA) a enviar la semana pasada una carta conjunta al gobierno sumándose a los grupos que exigen que los indígenas urbanos también sean considerados prioritarios en la campaña de inmunización.
Las dos entidades alegaron que, ante tal discriminación, ya se ha registrado un desplazamiento de indígenas urbanos hacia las aldeas, lo que puede facilitar la expansión del virus en las reservas.
Brasil es uno de los epicentros globales de la pandemia y el segundo país con más muertes por covid-19 en el mundo después de Estados Unidos, con cerca de 228.000 óbitos, y el tercero con más casos, con 9,3 millones, tras EE UU y la India.