Paraguay asumió hoy la presidencia de un Mercado Común del Sur (Mercosur) que sigue preocupado con la situación de Venezuela y espera que la nación gobernada por Maduro dé un vuelco democrático.
«Desde el Mercosur reiteramos nuestro compromiso con la defensa de los derechos humanos, la libertad de los presos políticos y la pronta adopción de un calendario electoral que garantice un proceso transparente», declaró Mauricio Macri durante la cumbre de presidentes del Mercosur.
Ninguna de las autoridades presentes pasó por alto la situación de Venezuela, suspendida del Mercosur por lo que en su momento Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay consideraron una ruptura institucional.
Michel Temer, Macri y Horacio Cartes ratificaron que la situación que llevó a esa decisión se mantiene, que aún existen presos políticos en ese país y que la democracia está lejos de ser plenamente restaurada.
La voz disonante fue la del Evo Morales, con voz pero sin voto en la cumbre del Mercosur, quien pidió que Venezuela sea reincorporada al bloque pues, más que sanciones, lo que precisa es la solidaridad de los países latinoamericanos.
A la cumbre de Brasilia asistió también David Granger, presidente de Guyana, y representantes de Chile, Colombia, Ecuador, Perú y Surinam, países que mantienen un estatus de Estados asociados al bloque suramericano. También estaba presente Tabaré Vásquez, mandataio de Uruguay.
Otra de las preocupaciones de los líderes del Mercosur fue el estado de la negociación con la Unión Europea, que todos coinciden en que está en sus fases finales, aunque aún no se concreta.
«Por primera vez en veinte años» se «está realmente cerca de llegar a un acuerdo de libre comercio con la Unión Europea», subrayó Temer.
Macri coincidió y apuntó que «la negociación con la Unión Europea es particularmente relevante» porque son regiones complementarias y la UE es destino natural de una buena parte de las exportaciones suramericanas.
«Hace 21 años que buscamos ese acuerdo y ya es hora de que lo alcancemos», declaró Cartes al recibir la presidencia rotativa del Mercosur de manos del presidente brasileño, anfitrión de la cita.
Cartes enfatizó que ese acuerdo está hoy mucho más cerca y que puede firmarse durante la presidencia paraguaya del bloque, que será coincidente con sus últimos meses de mandato, pues entregará el poder en agosto al vencedor de las elecciones del próximo abril.
La importancia de un acuerdo comercial con la UE fue también subrayada por Vázquez, quien fue un poco menos optimista y puso el dedo en la llegada de las discordias que pueden poner en peligro un consenso.
Según Vázquez, el Mercosur asumió «con fuerza, con seriedad y con responsabilidad» las negociaciones con la UE y presentó una oferta que abarca 92% de su universo exportador, con lo que ahora la palabra la tiene el bloque comunitario.
«pese a nuestro empeño, el acuerdo aún no se ha concretado», resaltó Vásquez. Agregó: «Lo que falta no es menor», pues se refiere sobre todo a carnes y biocombustibles, que son fundamentales para el Mercosur.