Este miércoles el periodista y escritor argentino Andrés Oppenheimer criticó que la política internacional se indigne por la crisis venezolana pero no por la cubana.
En un artículo publicado en El Nuevo Herald, el comunicador indicó que la elección del nuevo encargado de la Presidencia de Cuba corre con una alta probabilidad de que sea elegido a dedo por Raúl Castro.
Su hijo, el coronel Alejandro Castro Espín, o el actual vicepresidente, Miguel Díaz-Canel, forman parte de los candidatos.
Resaltó que existe una interrogante que no deja de ser inquietante: ¿por qué no hay una indignación mundial por la dictadura cubana? Si bien, el presidente de EE UU, Donald Trump, “canceló” la normalización de relaciones con Cuba, aún el presidente estadounidense ha dejado intactos los aspectos más importantes con ese país.
Por otra parte, la Unión Europea firmó un acuerdo con Cuba para normalizar las relaciones. Países latinoamericanos emiten críticas de la dictadura cubana muy rara vez, señaló Oppenheimer.
Por último, concluyó que denunciar los abusos del régimen de Nicolás Maduro es lo correcto. Mientras que, ignorar los abusos de Cuba es incorrecto y una falsedad política.
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