La inmigración irregular a la Unión Europea (UE) se redujo 38% en 2024 y alcanzó el nivel más bajo desde 2021, cuando los cruces fronterizos ilegales aún se veían afectados por la pandemia del covid-19, según los datos preliminares publicados este martes por la Agencia Europea de Fronteras (Frontex).
El descenso del número total se debió principalmente a una caída de 59% de las llegadas por la ruta del Mediterráneo central debido al menor número de salidas desde Túnez y Libia y a la reducción de 78% en la ruta de los Balcanes occidentales tras los grandes esfuerzos de los países de la región por frenar el flujo.
A pesar de la importante disminución en la primera ruta, esta sigue representando 66.766 cruces ilegales, la segunda más alta de todas las rutas, señaló Frontex.
Aumentos de inmigrantes en las demás rutas, incluida la canaria
Las demás rutas registraron aumentos de entradas irregulares más o menos importantes, como la de África occidental, que se refiere a las islas Canarias, donde el flujo de llegadas aumentó 18% en 2024 con respecto a un año antes, hasta 46.877, la cifra más alta desde que Frontex comenzó a recopilar datos en 2009.
Según la agencia, el aumento de este número de llegadas se ha visto impulsada por las salidas desde Mauritania, pese a que se ha visto reducida la procedencia desde otros países.
También la ruta del Mediterráneo oriental las detecciones de cruces ilegales aumentaron, en este caso 14% hasta 69.436, impulsadas por nuevos corredores desde el este de Libia, con migrantes procedentes principalmente de Siria, Afganistán y Egipto.
Asimismo aumentaron las llegadas, si bien solo 1%, en la ruta del Mediterráneo occidental, hasta 17.026.
Por otra parte, en las fronteras orientales terrestres se triplican durante el año pasado los cruces, sobre todo en las fronteras con Ucrania y Bielorrusia.
El aumento es en este caso de 192%, hasta 17.001 entradas irregulares, de acuerdo con los datos preliminares de Frontex.
Por último, en el Canal de la Mancha, las detecciones de intentos de cruce al Reino Unido aumentaron ligeramente, 9% en comparación con 2023, hasta 67.552.
«A pesar de la persistente presión migratoria, la intensificación de la cooperación de la UE y sus socios contra las redes de tráfico (ilegal de migrantes) ha reducido considerablemente los cruces en las fronteras exteriores de Europa, con algo más de 239.000 detecciones registradas el año pasado», indicó Frontex.
Mujeres afganas y sirias
Un examen más detallado de la demografía muestra que la proporción de mujeres entre los migrantes detectados se mantuvo estable en algo más de 10%.
Frontex destaca que 62% de todas las mujeres que llegaron a las fronteras de la UE lo hicieron a través de la ruta del Mediterráneo oriental, lo que refleja los peligros y la dinámica cambiante de otras rutas.
Las mujeres afganas y sirias constituían la mayoría de este grupo.
La proporción de menores entre los inmigrantes irregulares aumentó el año pasado a 16%, frente a 13% de 2023.
Al comentar las cifras preliminares, el director ejecutivo de Frontex, Hans Leijtens, señaló que cada año Europa se enfrenta «a retos únicos en nuestras fronteras que requieren una vigilancia y una adaptabilidad constantes».
«Si bien en 2024 se produjo una reducción significativa de los cruces irregulares de fronteras, también se pusieron de manifiesto nuevos riesgos y cambios en la dinámica. Frontex y las autoridades fronterizas de toda Europa deben mantenerse preparadas y flexibles para hacer frente con eficacia a estos retos cambiantes», señaló.
La agencia europea destacó que las redes de tráfico ilícito se adaptan a las nuevas circunstancias y los flujos migratorios pueden cambiar rápidamente.
Aumento de violencia por parte de traficantes
Por ejemplo, las autoridades informaron de un aumento de la violencia por parte de los traficantes a lo largo de la ruta de los Balcanes occidentales, y la creciente inestabilidad en regiones como el Sahel sigue impulsando la migración hacia Europa, explicó.
Las travesías marítimas, normalmente orquestadas por redes de delincuencia organizada, siguen suponiendo un peligro extremo para los migrantes, añade Frontex.
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) calcula de hecho que 2.300 personas perdieron la vida en el mar solo en 2024, «lo que subraya el trágico coste humano de estas peligrosas rutas», concluye la Agencia Europea de Fronteras.