Un centenar de indígenas de varias regiones colombianas se sumaron este viernes en Bogotá a las protestas contra el gobierno del presidente, Iván Duque, al que le solicitan atender el clamor del pueblo que pide cambios sociales.
«Venimos a sumarnos a las protestas nacionales. A respaldar las propuestas de varios sectores que piden echar para atrás cosas como la reforma de pensiones y la tributaria, mejorar la educación y cuidar el medioambiente», dijo a Efe la consejera de la Organización Nacional Indígena de Colombia, Aída Quilcué.
La líder indígena explicó que también se suman a las movilizaciones porque siguen las violaciones de los derechos humanos y la violencia contra los pueblos aborígenes.
«La minga indígena siempre ha estado en asamblea permanente, en movilizaciones permanentes a raíz de la sistemática violación de los derechos humanos que se está viviendo en el Cauca y en las distintas regiones del país», explicó Quilcué.
Las centrales obreras y movimientos sociales que convocaron la protesta y los dos «paros nacionales» de la última semana han reiterado sus peticiones al gobierno para que abra un diálogo «democrático y eficaz» con ellos.
Seguirán en las protestas
Los indígenas participarán en las actividades que programen los promotores de las protestas, especialmente lo que tenga que ver con los estudiantes de las universidades públicas.
Un grupo de alrededor de 200 estudiantes acompañaron hoy a los indígenas en un recorrido desde la Universidad Nacional hasta el centro de la ciudad. A pesar de un torrencial aguacero, hicieron un homenaje al joven Dilan Cruz, de 18 años de edad, que murió el lunes pasado, víctima de la violencia policial.
Indígenas y estudiantes se detuvieron en una esquina de la avenida 19 donde Cruz cayó herido el sábado pasado e hicieron un baile en su honor. Luego siguieron su recorrido hasta la céntrica plaza de Bolívar, encabezados por niñas que llevaban la bandera roja y verde del Consejo Regional Indígena del Cauca.
El respaldo a las manifestaciones sociales, según Quilcué, no implica estar de acuerdo con los sectores que plantean la salida del presidente Duque.
«La minga, por el momento, no tiene ese tema», subrayó la líder indígena. Sin embargo, dijo que el gobierno debe cumplir con los acuerdos firmados con distintos sectores e implementar el acuerdo de paz con las FARC que se firmó hace tres años.
Por su parte, Diego Armado Tabarquino, líder del Consejo Regional Indígena de Caldas, aseguró a Efe que llegan a Bogotá, puesto que no están de acuerdo con Duque porque «no defiende la vida».
«La minga indígena en Bogotá está porque creemos y pensamos que en estos momentos se están tramitando leyes, decretos y normas que van en contra de la vida, en contra de los derechos naturales, en contra de los derechos de la sociedad y en contra del pueblo colombiano», aseguró Tabarquino.