El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, anunció este sábado que pedirá al Congreso extender el estado de alarma con el confinamiento de la población por la pandemia de coronavirus hasta el 9 de mayo, aunque con un alivio para los niños.
Los más pequeños podrán salir brevemente y con medidas de precaución, a partir del 27 de abril, explicó Sánchez en una comparecencia televisada.
El líder socialista español alabó la «respuesta ejemplar» de la población «en esta situación extrema», respetando un confinamiento en marcha desde el 14 de marzo y con el que «hemos salvado decenas de miles de vidas».
España suma hasta ahora 20.043 muertes por coronavirus, con 191.726 casos confirmados, aunque el ritmo de aumento de los contagios se ha ido reduciendo progresivamente en las últimas semanas.
Sánchez destacó esta fuerte reducción del ritmo de los contagios gracias al confinamiento «tan duro», pero advirtió de que «estos logros son todavía insuficientes y, sobre todo, frágiles», por lo que «no podemos ponerlos en riego con decisiones precipitadas» en la relajación de las drásticas medidas que vive el país.
La relajación del confinamiento se realizará de forma desigual en todo el país en función de la evolución de la enfermedad en distintos territorios, aunque evitó dar detalles concretos por el momento.
Pedro Sánchez también renovó su llamamiento a las demás fuerzas políticas para lograr un gran pacto nacional que permita un «acuerdo de reconstrucción» de la economía.
Para ello, urgió de nuevo el apoyo de la Unión Europea a fin de que no repita «los errores del pasado» y no permita con una posible inacción el crecimiento del populismo antieuropeísta.
Con este nuevo calendario, el gobierno de España aprobará inicialmente el próximo martes la nueva extensión de las medidas especiales, que sería votada un día después en el Congreso de los Diputados y el viernes sería refrendada finalmente en una reunión especial del Consejo de Ministros.