MUNDO

EE UU denuncia violaciones de derechos humanos en Venezuela

por Avatar EFE

Mike Pompeo, secretario de Estado norteamericano, señaló este miércoles por graves violaciones de derechos humanos al régimen de Venezuela, Cuba, Irán y China en su informe anual, en el que volvió a evitar la expresión «territorios ocupados» para referirse a Cisjordania y Gaza.

«Rezamos por el día en el que los cubanos, venezolanos, chinos e iraníes y el resto del mundo pueda hablar libremente sin temer a sus propios gobiernos», manifestó Pompeo, reseñó Voz de America.

Venezuela

En rueda de prensa, Pompeo dijo que el régimen incrementó la represión tras el fallido ataque con drones contra Nicolás Maduro. Citó como ejemplo la detención del diputado Juan Requesens, acusado de supuesto responsable.

El informe anual sobre Derechos Humanos del Departamento de Estado, publicado este miércoles y relativo a 2019, sirve de guía al Congreso estadounidense para determinar la ayuda exterior que se concede a cada país.

Washington acusó el de Nicolás Maduro, al que se refiere como «antiguo régimen», de graves violaciones de los derechos humanos (ejecuciones extrajudiciales y torturas por las fuerzas de seguridad).

Como ya ha dicho, el gobierno de Donald Trump considera que el apoyo de cientos de agentes de las fuerzas de seguridad cubana ha permitido a Maduro mantenerse en el poder y ha impedido que sea sustituido por Juan Guaidó, considerado como presidente interino de Venezuela por medio centenar de naciones.

Cuba

Con respecto a Cuba, Estados Unidos condenó la existencia de «presos políticos». Citó como ejemplo el caso del disidente José Daniel Ferrer, líder de Unión Patriótica de Cuba, Preso desde octubre del 2019 por una supuesta agresión a otro hombre, cargo que sus allegados niegan.

«El nombre de José Daniel Ferrer aparece 17 veces en este informe. Él es uno de los miles de presos políticos que durante años han sido arrastrados, encadenados y golpeados a manos del régimen. Mañana será sentenciado por una corte cubana», dijo Pompeo, que consideró que los cargos en su contra son falsos.

China

Pompeo criticó el uso por el Estado chino de técnicas destinadas a «vigilar a los disidentes políticos», las cuales van desde el reconocimiento facial hasta el uso de aplicaciones móviles.

El gobierno de Trump denuncia que las autoridades de la región noroccidental china de Xinjiang han expandido los «campos de reeducación»para miembros de minorías musulmanas como los uigures y kazajos.

«Medios internacionales, organizaciones de derechos humanos y personas que han sido detenidas en esos campos aseguran que las fuerzas de seguridad cometieron abusos, torturas y asesinatos», indica el informe. Los señalamientos pueden provocar una reacción de Pekín, como ha ocurrido en otras ocasiones.

Irán

Respecto a Irán, Estados Unidos formula una fuerte acusación. Asegura que muchos de los abusos a los derechos humanos fueron «perpetrados como parte de la política gubernamental». Por ello no se han tomado «pasos efectivos» para investigar, enjuiciar y castigar a los funcionarios que los cometieron.

«Esto -añade el informe- incluye abusos y numerosas muertes en custodia durante los últimos años. La impunidad siguió siendo generalizada en todos los niveles del gobierno y las fuerzas de seguridad».

Cisjordania y Gaza

En cuanto a Israel, el informe sigue sin usar la expresión «territorios ocupados» para referirse a Cisjordania y Gaza, algo que dejó de hacer en 2018. Subraya que las fronteras de Jerusalén deben decidirse en «negociaciones entre las partes», proceso para el que Estados Unidos ha presentado un plan que los palestinos rechazan.

El texto cita los asesinatos y detenciones arbitrarias como los principales abusos cometidos tanto por autoridades israelíes como por las palestinas. Además de las «restricciones significativas a la libertad de movimiento» impuestas por Israel y la violencia y el «trabajo infantil forzado» por el movimiento Hamás en Gaza.

El documento examina el comportamiento de los gobiernos de todo el mundo respecto a los derechos humanos, aunque no el de Estados Unidos, donde grupos como Amnistía Internacional han denunciado aumento de las violaciones de los derechos de minorías y migrantes desde que el presidente Donald Trump asumió el poder en 2017.