Si en la alfombra roja de los Oscar ganaron por mayoría los tonos pastel y el blanco, con destacados rojos intensos como el de Cara Delevingne o el azul de Cate Blanchett, en la fiesta de Vanity Fair, posterior a la gala, el negro fue la estrella.
La modelo Kylie Jenner lució una elegante palabra de honor confeccionado exclusivamente para ella por John Galliano para Maison Margiela, en lamé con irisaciones en plata y un gran lazo sobre el pecho.
Divertida y mostrando las posibilidades de vuelo de su vestido, Eva Longoria lució un bustier, cruzado en la espalda con cintas, y falda transparente en el color de la noche.
Con un diseño más recatado de Chanel y sobre unas enormes sandalias de plataforma, la actriz francesa Marion Cotillard fue otra de las invitadas que optó por el negro.
Vaporoso, en tul, con detalles de luciérnagas y con la espalda al descubierto fue la elección de la actriz Leslie Mann que apostó por un Óscar de la Renta; mientras que la actriz y prescriptora Alexandra Daddario optó también por un vestido negro de lentejuelas con mangas abullonadas.
Con un estilo cercano a lo gótico, la cantante Billie Eilish acudió a la fiesta con un diseño con una gran cola. Con cola, pero con un corte más ceñido a su silueta, y detalles de pedrería de brillantes en el cuello, la cantante Christina Aguilera también apostó por el negro.
Lily Aldridge lució un vestido con corte asimétrico en el cuello, de charol, muy Matrix.
La actriz británica Jodie Turner-Smith nunca decepciona con sus estilismos sobre la alfombra roja. En esta ocasión posó casi como una estatua con un diseño negro, dibujado con rombos brillantes en la falda y una delicada nota de color en rojo en la parte superior.
Otros looks
Aparentemente, sencillo y rojo fue el vestuario de Rooney Mara, una de las pocas que realizó un cambio para la fiesta de la revista. A su vestido de McQueen vintage con el que posó antes de la gala de los Oscar incorporó un abrigo rojo.
Sensual y con un generoso escote, fue el vestido rojo con el que apareció la modelo Gigi Hadid. Mientras que la modelo puertorriqueña Joan Smalls lució un intenso lima.
Cercano al mostaza, Sharon Stone, eligió un vestido capa, no muy acertado.
Entre los caballeros, siempre elegante, Ricky Martin. James Marsden apostó por una chaqueta de esmoquin blanca mientras que también atrevido, en verde, llegó Idris Elba. Pero para rompedor Russell Westbrook, que lució un esmoquín con pantalón corto.