El esperado capítulo final de la saga Skywalker contará con un importante papel para la princesa Leia, el querido personaje de Star Wars interpretado por la difunta actriz Carrie Fisher.
El guionista y director J.J. Abrams dijo que tenía suficiente material para hacer de Leia un personaje clave en El ascenso de Skywalker, la película de Star Wars que se estrena en los cines el 20 de diciembre.
«No podríamos contar la historia sin Leia», dijo Abrams en una entrevista el miércoles. «Ella es la madre del villano de la obra. En cierto modo, también es la madre de la resistencia, de la rebelión, la líder, el general».
Fisher falleció en 2016 a los 60 años.
«Su papel es, yo diría, esencial. No estamos incluyendo a Leila solo por un tema de estética», añadió el cineasta.
En las películas recientes Leia había ascendido a general dirigiendo la lucha contra la Primera Orden en esa galaxia muy, muy lejana. Su hijo es Kylo Ren, interpretado por Adam Driver, el guerrero que se puso al frente de la Primera Orden a finales de 2017.
Si Fisher siguiera viva «no tengo duda de que habríamos hecho, estoy seguro, grabaciones adicionales y otras cosas», dijo Abrams. «Pero el hecho de que tuviéramos el material para hacer lo que hicimos es increíblemente gratificante». Las escenas en las que aparece se hicieron con las de grabaciones de la película de 2015 El despertar de la fuerza.
Oscar Isaac, quien interpreta al piloto Poe Dameron, dijo que sintió «una verdadera melancolía» cuando vio a Fisher en la pantalla en El ascenso de Skywalker.
«La ves justo ahí, y está tan vital y viva, y pensar que ya no está allí, y que no podrá ver cómo nos despedimos de la princesa Leia. Es agridulce», concluye.