Ya han pasado varios meses desde le estreno de Avengers: Endgame y, sin embargo, todavía se discuten aspectos de la cinta, entre ellos destaca la historia de cómo se filmó la escena de la muerte de Iron Man.
Los responsables de la película revelaron que la icónica escena no se grabó en el marco de la batalla. Inicialmente el momento cumbre de la pelea, cuando Tony Stark toma las gemas del infinito, tenía otro estilo. Además, se grabaron varias versiones en la primera etapa de producción de la película. “Había muchas otras opciones para la frase que dice Tony Stark antes de chasquear los dedos”, contó el guionista Christopher Markus.
“Robert Downey Jr. hizo un montón de improvisaciones, algunas de ellas eran graciosas, algunas eran tontas, algunas eran obscenas”, añadió el editor Jeff Ford. “Pero ese es el proceso de Robert para encontrarla. Sabíamos que nunca íbamos a usar una frase tonta, pero él pasa por eso para encontrar ritmos y como actor es brillante al explorar eso”.
“Los Russo le dieron una cámara y le permitieron hacer muchas cosas diferentes. Así que hicimos eso y probamos con algunas de ellas. Algunas frases eran obscenas”, recordó Ford.
Antes de que “Yo soy Iron Man” se instalara como la frase final de Tony Stark, la producción de la cinta eligió una versión de la escena en la que ni Tony ni Thanos decían nada.
“La mejor versión que teníamos era una silenciosa en la que Stark y Thanos solo se miraban y todo estaba en silencio”, contó Ford. “Pero no completaba ese arco ni se cerraba esa narración correctamente. Thanos había dicho ‘Soy inevitable’ un par de veces en la película. Y Tony dice que no, que no lo es. Necesitaba ese intercambio para que, a mi juicio, fuera satisfactorio. Así es como llegamos a esa línea”.
La génesis de un momento clave
Tony Stark cerró su primera película de la saga revelándole al mundo que él era Iron Man. Anteriormente los directores Joe y Anthony Russo explicaron que el regreso de la famosa frase se gestó cuando comenzaron a montar la cinta y fue una idea del editor Jeff Ford.
Con la frase ya establecida el siguiente paso era grabar la escena a pesar de que Robert Downey Jr. no estaba demasiado convencido por lo emocional que era la línea. Finalmente, Downey se convenció y la filmación de la escena se concretó en un estudio de Atlanta en 2018.
Al respecto, la productora ejecutiva Trinh Tran recalca que la incorporación de la frase fue algo de “último minuto”. De hecho, la muerte de Iron Man fue una de las últimas escenas que se grabaron para Avengers: Endgame.