El gobierno del presidente de Francia, Emmanuel Macron, y los sindicatos reafirmaron este jueves su pulso por el aumento de la edad de jubilación a 64 años.
Esto a propósito de la reforma de las pensiones durante el decimoquinto día de huelga en el transporte en que unos y otros tienen cita para negociar.
La edad de equilibrio
El líder de la primera central del país, Laurent Berger, insistió en su exigencia de que se retire la llamada «edad de equilibrio» que en la práctica supondrá aumentar la edad de jubilación con carácter general a los 64 años.
Berger, cabeza visible de los sindicatos reformistas que defienden el elemento troncal de la reforma, advirtió de que si el Ejecutivo mantiene la edad de equilibrio la movilización continuará en enero.
El secretario general de la Confederación Francesa de Trabajadores, que este miércoles fue recibido por separado por el primer ministro, como el resto de los responsables de los sindicatos y de las organizaciones patronales, dijo que había sentido la voluntad de discutir, pero con gestos muy tímidos.
El nuevo secretario de Estado de Pensiones, Laurent Pietraszewski, puso en evidencia el bloqueo de momento sobre la elevación de la edad de jubilación. Hizo hincapié en que hay que conseguir el equilibrio financiero para el paso a un sistema universal por puntos.
Para ese equilibrio hace falta una noción de edad de jubilación, repitió Pietraszewski. Lanzó el desafío a los sindicatos de que presenten otro camino.
Berger aseguró que la cuestión financiera también es importante para ellos. Pero dijo que por ahora el Ejecutivo no les ha indicado cuánto van a costar las medidas incluidas en la reforma. Incluye el aumento a 1.000 euros de las pensiones mínimas a los que han completado el período de cotización. Además de las alternativas a la edad de equilibrio.
La CFDT sugirió que se incrementen las cotizaciones o que se recurra al fondo de reserva que se acumuló en años de bonanza económica.
El presidente de la patronal Medef, Geoffroy Roux de Bézieux, justificó que el incremento de las cotizaciones supondría una rebaja en las nóminas de los asalariados (que abonan 40%). Agregó que también afectaría al empleo.
Roux de Bézieux aseguró que la disminución de las cargas empresariales de los últimos años han permitido crear empleo.
El primer ministro Édouard Philippe recibirá esta tarde a todos los sindicatos y organizaciones patronales para una reunión multilateral en la que se esperan nuevos signos de flexibilización de los que están dispuestos a negociar.
Porque una parte de los sindicatos reclama la retirada total del proyecto de reforma y tiene intención de seguir con las convocatorias de paro durante las vacaciones de Navidad.
Sigue la huelga
Este jueves solo circulan en Francia 40% de los trenes de alta velocidad y de los regionales. Una cuarta parte de los de cercanías y en las conexiones internacionales. Por ejemplo, únicamente uno de cada cuatro entre Francia y España.
En el área metropolitana de París, están completamente cerradas seis líneas de metro, ocho funcionan parcialmente, pero nada más que durante las horas punta, y dos -las automáticas- normalmente.