El triple campeón del mundo neerlandés Max Verstappen, líder del campeonato, y su compañero, el mexicano Sergio Pérez, recién renovado con Red Bull hasta finales de 2026, intentarán que las aguas vuelvan a su cauce para la dominante escudería austriaca en el Gran Premio de Canadá. El noveno del Mundial de Fórmula Uno que se disputa este fin de semana en el circuito Gilles Villeneuve de Montreal.
Verstappen, de 24 años de edad, que busca un cuarto título seguido, no pasó del sexto puesto hace dos domingos en Mónaco. Allí, Checo se tuvo que retirar a las primeras de cambio, accidentado en la primera vuelta de una carrera que ganó el monegasco Charles Leclerc. El piloto cruzó por delante del australiano Oscar Piastri (McLaren) y de su compañero en Ferrari, Carlos Sainz, tercero en el principado de la Costa Azul. En la carrera el otro español, el doble campeón del mundo asturiano Fernando Alonso (Aston Martin), fue undécimo.
Alonso -en una segunda juventud a un mes de cumplir 43 años- sufrió idéntica mala suerte que ‘Checo’ en la calificación monegasca. Ambos se encontraron tráfico en el circuito más corto, estrecho y lento del calendario, quedando eliminados en la primera ronda de la calificación (Q1).
En una pista en la que es casi imposible adelantar, el asturiano hizo lo que pudo para acabar undécimo. Sin embargo, al mexicano le golpeó por detrás -saliendo de la primera curva- el danés Kevin Magnussen, en un accidente en el que también se vio involucrado el otro Haas, el del alemán Nico Hülkenberg. El choque puso fin a la actuación de los tres.
Checo renueva
Checo, nacido hace 34 años en Guadalajara (Jalisco), con seis victorias y 39 podios en la F1, que cedió el segundo puesto del Mundial al ser octavo en Imola, perdió el tercero. Se accidentó en Montecarlo, donde descendió al quinto puesto general. Pero esta semana Red Bull premió la lealtad y las prestaciones de los pasados tres años y medio del mejor piloto de la historia de México con la renovación de su contrato antes de la cita en Canadá. En principio, su fichaje se prolongará hasta finales de 2026.
Red Bull llega a Canadá después de ganar todas las carreras del año pasado salvo una: la que se adjudicó, en la noche singapurense, Sainz. De las restantes 21, ‘Mad Max’ se anotó 19, en un 2023 en el que el astro neerlandés batió casi todos los récords posibles en la categoría reina. Y este curso, tras ganar cuatro de las primeras cinco carreras y haber encabezado tres ´dobletes´ en las primeras cuatro pruebas, todo apuntaba a otra exhibición de Verstappen y de la escudería austriaca.
Pero, después del triunfo de Sainz en Australia y, sobre todo, tras las últimas tres carreras, en las que el inglés Lando Norris (McLaren) ganó en Miami, antes de hacerle sudar tinta en Imola a ´Mad Max´, que no pasó del sexto en Mónaco, las alarmas no han saltado. Pero ya hay gente mirando hacia ellas.
Verstappen lidera ahora el certamen con 169 puntos, 31 más que Leclerc y 56 sobre Norris. Carlos ocupa la cuarta plaza, con 108 unidades, una más que Checo. Y Alonso la novena, con 33. Y en el Mundial de constructores, Ferrari se colocó a sólo 24 puntos de los 276 con los que lideran los toros rojos. Con McLaren al quite, a 94.
Mercedes ocupa el cuarto puesto, con 96 puntos; y Aston Martin, en un arranque bastante más discreto que el año pasado, es quinta, con 44.
En busca de reacción
Así que en Canadá habrá reacción -la de Red Bull- o emoción: la que adquiriría el campeonato si se confirmase que tanto Ferrari o McLaren le pueden hacer frente al equipo de la bebida energética. Algo que supondría una buena noticia para Sainz, con tres victorias en la F1 y que en Mónaco sumó su vigésimo segundo podio en la categoría reina.
El Gran Premio de Canadá se disputa en el circuito Gilles Villeneuve, que lleva el nombre del mito canadiense, padre de Jacques: campeón mundial en 1997.
La bella pista canadiense, construida en la isla artificial de Notre-Dame, que bañan las aguas del río San Lorenzo -sede de la Expo’67 y que en los Juegos Olímpicos de Montreal’76 albergó, entre otras, las pruebas de piragüismo- mide 4.361 metros, ha sido re-asfaltada este año y tiene 14 curvas, seis de ellas a la izquierda. Destacando la décima -su famosa horquilla- y las dos últimas, conformando la ‘chicane’ que desemboca en el ‘Muro de los campeones’: bautizado de esa manera después de que allí se accidentasen o perdieran sus posibilidades de éxito muchas de las estrellas de este deporte.
Nadie ha ganado más veces (siete) que el inglés Lewis Hamilton (Mercedes) -que el año que viene sustituirá en Ferrari a Sainz; y que el alemán Michael Schumacher, convaleciente aún del grave accidente de esquí que sufrió a finales de 2013 en Meribel (Francia). Sus siete títulos mundiales igualó el espectacular y excéntrico campeón de Stevenage hace cuatro temporadas. Ambos comparten, también, el récord de ‘poles’ en el Gilles Villeneuve: seis.
Pase lo que pase en Montreal, Verstappen llegará líder del Mundial al Gran Premio de España. La carrera se disputará dentro de dos semanas en el barcelonés circuito de Montmeló. Allí afrontará su última carrera como piloto de Alpine el francés Esteban Ocon -ex compañero tanto de ‘Checo’, como de Alonso-, del que se anunció que no seguirá en el equipo galo el año próximo.
En Montreal, donde se rodará con neumáticos de la gama de compuestos más blanda, los C3 -duros, reconocibles por la raya blanca-, los C4 -medios, raya amarilla- y los C5 -blandos, roja-, Alonso festejó una de sus 32 victorias en la categoría reina. En 2006, el año que revalidó título. Saliendo desde la ‘pole’. En una pista en la que subió otras dos veces más al podio: en 2010, cuando acabó tercero a bordo de un Ferrari; y el año pasado, al concluir segundo.
Los entrenamientos libres para el noveno de los 24 Grandes Premios del Mundial más largo de la historia (que en España se podrá ver en horario de tarde-noche) arrancan este viernes; y se completarán el sábado, horas antes de la calificación, que ordenará la parrilla de salida de la carrera del domingo. Prevista a 70 vueltas, para completar un recorrido de 305,2 kilómetros.